Pulsaciones, Javier Ruescas y Francesc Miralles

  
Elia acaba de salir del coma. ¿Lo bueno? Está bien y tiene móvil nuevo, así que por fin puede hablar con todo el mundo por HeartBits.
¿Lo malo? 
No recuerda los tres días anteriores al accidente. 
¿Qué habrá pasado durante ese tiempo? 
¿Quién será ese tal Phoenix que no deja de mandarle mensajes? ¿Y por qué cada vez que Elia piensa en lo que ha podido olvidar… siente que le falta el aire?

Lo cierto era que tenía muchas ganas de leer este libro por la expectación que ha creado su salida y porque su formato me llamaba mucho la atención. Por ese motivo, en cuanto pude, me hice con él y comencé a devorarlo. Los puntos fuertes que tiene Pulsaciones es, precisamente, que es un libro de una lectura muy ágil, que no se tarda mucho tiempo en leer y, la verdad, es que actualmente agradezco eso. Seamos sinceros, para libros densos y complicados ya tengo los de la universidad. 
En cuanto a eso, el libro cumple su función a la perfección. Sin embargo, he de decir que me sobran personajes. En mi opinión, este tipo de historias, al estar así escritas, no necesitaban más que a los protagonistas o como mucho a la mejor amiga de la chica. Si hubiera sido narrado puede que pensara diferente, porque se habrían ampliado las tramas de los secundarios, pero...No sé. Yo creo que el libro habría estado bien solo con ellos dos y algunas pinceladas del mundo de ella, de sus amigos, pero nada más. Y decir que me quedo con Phoenix, sin duda...¡Quiero más aforismos en mi vida!

PHOENIX_13:31  Pero, aunque no sea nuestra voz, me gusta pensar que en el fondo sí que somos las palabras que escribimos, por mucho que nos editemos a nosotros mismo cuando sea necesario o nos dejemos llevar por la alegría o la rabia del momento...Además, siento que de esta forma podemos llegar a decirnos cosas que quizá no nos atreveríamos a revelar si nos miramos a los ojos.

La idea es muy buena. Eso que vaya por delante, pero se hace demasiado corto. ¡Necesito más páginas! Sobre todo con ese final...¿Cómo es posible que después de semejante bomba informativa no ocurra nada más? Que sí, que está muy bien eso de jugar con la imaginación del lector, pero yo puedo llegar a ser muy paranoica y pensar cada cosa...
En cuanto al estilo, a la forma narrativa...Poco hay que decir. No porque no tengan calidad, Francesc Miralles es un autor que me encanta y Javier Ruescas ha demostrado que tiene un estilo único, como una marca personal, pero al estar escrito en mensajes tal vez no se nota tanto la calidad narrativa. No es una pega, solo un comentario, porque creo que lo novedoso de esta forma de narrar, suple con mucho el hecho de que pueda chocar al principio por no ser lo que vemos normalmente. Es una apuesta arriesgada el escribir así, solo por eso, y antes de leer el libro, ya tenían todo mi apoyo. ¿Quién sabe? Es muy posible que ellos sean los precursores de esta idea, los pioneros, y que poco a poco vayamos viendo más libros con este estilo.
En definitiva, estoy segura de que se convertirán en los precursores de este tipo de literatura, de los libros en formato whatsapp. Si quieres leer una historia curiosa, bien estructurada y con frases que te sacarán una sonrisa, este es tu libro.