¿Qué Beneficios tiene vivir en Gratitud?

Además de ser un sentimiento, la gratitud también puede convertirse en una actitud que nos permita ver las maravillosas oportunidades que nos presenta la vida, y que trae consigo múltiples beneficios.

Tal como plantea Gananci, tan sólo una afirmación poderosa puede permitirnos vivir de una manera extraordinaria. Entre ello, cabe señalar la importancia de emitir afirmaciones que nos conecten con las bondades de la vida.

Para empezar a vivir en gratitud, debemos percatarnos de todas las cosas buenas que están en nuestras vidas. Pues, usualmente, tendemos a pensar sólo en las cosas negativas y en lo que deseamos que esté lejos de nosotros, pero este tipo de pensamientos sólo suelen traer más carencias y no permite que el ser humano logre establecer una verdadera conexión con la abundancia.

En la medida en que lleguemos a experimentar más gratitud, podremos sumar mayores beneficios a nuestros días, como, por ejemplo, empezar a vivir sintiendo tranquilidad emocional, felicidad… También se verá afectado de manera positiva nuestro modo de relacionarnos con las demás personas.

Sentir gratitud puede generar cambios importantes en nuestras vidas, pues este es el mejor camino que existe para empezar a vivir en armonía y en alegría.

Sin embargo, si observas que eres parte de las personas que no logran ver las cosas buenas en la vida, y que por el contrario se quejan continuamente, resultará valioso para tu vida que empieces a cultivar y desarrollar esta gran virtud.

Los Beneficios de ser agradecido

Empieza a vivir sintiendo gratitud

Empezar a vivir sintiendo gratitud te permitirá beneficiarte de magníficos resultados, como por ejemplo:

1. Tu autoestima comenzará a aumentar y cada día aprenderás a quererte mucho más.
2. Las relaciones que tengas con las demás personas también serán mucho más sólidas y perdurables, además de que tu vida se orientará hacia una visión optimista.
3. Vivir en gratitud contribuirá a que puedas sentir más fortaleza al momento de hacer frente a situaciones complejas, dificultades, e incluso a vivir con menos ansiedad y estrés.
4. Te permitirá adaptarte de forma positiva ante las circunstancias que te presente la vida, sin sentir miedo ante lo incierto que pueda parecer el futuro.
5. Tu forma de ver la vida y de comportarte tendrán un valor ético.
6. Empezarás a amarte cada día más en la medida en que las comparaciones con el resto de las personas disminuyan, pues comenzarás a valorar todo lo bueno que tienes alrededor.
7. Vivirás con tus emociones en equilibrio, de manera positiva, desechando todo lo negativo que pudiese estar presente en tu entorno.

Tal como hemos mencionado, hay personas que no son dadas a sentir gratitud y, por tanto, no pueden beneficiarse de todos sus efectos positivos. Así que, es importante que empieces a desarrollarla, empezando por agradecer cada día, todas las veces que puedas, por esas cosas que, aunque parecen mínimas, son valiosas y hacen de ti una mejor persona.

Incluso ver brotar una flor o una nueva hoja de tu planta preferida, es una gran dicha y un motivo para sentir y expresar gratitud.

Quizás no te has dado cuenta y estás rodeada de personas que están allí en tus momentos más difíciles, dispuestos a escucharte y no darte la espalda. No todos cuentan con ese privilegio. Sin embargo, es probable que ni siquiera lo hayas notado.

El hecho de sentir gratitud, no depende de tu religión. Al contrario, puedes estar agradecido por todas las buenas cosas que tienes, sin necesidad de pertenecer a una religión concreta, ni de asistir a ningún tipo de recinto religioso en particular.

Si quieres experimentar los beneficios de vivir en gratitud, te mostramos a continuación algunos pasos para que puedas, en primer lugar, ver todo lo bueno que hay en tu vida, y cómo empezar a vivir sintiendo gratitud.

Cómo sentir gratitud

1. Permanece atento: todos los días se presentarán muchos instantes por los cuales puedes sentir gratitud. Debes permanecer en estado consciente para poderlos observar.
2. Registra las acciones: o los momentos en los cuales te ocurran cosas positivas, incluso si consideras en principio que son mínimas. A medida que escribas y puedas luego leer todo eso, verás que tu concentración se va enfocando en el lado bueno de las cosas. Esto se transformará en energía que te hará sentir en armonía.
3. Continúa escribiendo: puedes redactar una carta dirigida a una persona a quien sientas que debas agradecerle algún gesto que tuvo contigo y que fue valioso para ti. Si le haces llegar la carta a dicha persona, crearás un campo energético positivo. Sin embargo, si no deseas enviarla, no tienes que hacerlo, pero sin duda este ejercicio incrementará tu capacidad para sentir gratitud y esto hará que lleguen cosas buenas a tu vida.
4. Aliméntate de conversaciones agradables: no permitas que tus conversaciones se concentren en aspectos negativos sobre la vida ni en problemas. Más bien, trata de dirigir la conversación hacia cosas buenas que te hayan ocurrido. De esta manera también podrás ayudar a otras personas a percatarse de las cosas buenas que también le han sucedido y que tal vez no han notado. Este ejercicio conversacional también ayudará a generar un ambiente de entusiasmo.
5. Demuestra tu agradecimiento: esto quiere decir que cada vez que una persona tenga un gesto de apoyo hacia ti, es importante que se lo hagas saber. Demuéstrale los buenos resultados que sus acciones positivas producen en tu vida. Hacer este ejercicio sin duda despertará en la otra persona deseos de seguir apoyando a otros y también podrás alegrar su vida.

Ten presente que no requieres de mucho esfuerzo para empezar a sentir gratitud y disfrutar sus beneficios. Al contrario, el hecho de poder sonreír, de poder disfrutar del sol, de saber que tienes personas importantes para ti a tu alrededor, así como el resto de pequeñas cosas que te ocurran a diario, ya tienen en sí un efecto beneficioso en tu vida, que sin duda te hará sentir alegría.