¡Joder!
Se me va Pepe, el de recursos humanos y tengo que encontrar a alguien que lo
sustituya. ¡Con lo bien que estamos funcionando y ahora se va a desbaratar
todo! ¿Tengo a alguien para ocupar su
puesto? ¿Necesito alguien de fuera? Tengo miedo, necesito a alguien que
haga bien su trabajo, que no me engañe a las primeras de cambio y se adapte al
puesto lo antes posible. Necesito a
alguien de confianza. Ya podría dejar de escribir, esta es la
respuesta, esto es lo que buscan las empresas, y Jordi Pujol.
Lo complicado es el paso
siguiente, ¿Cómo puedo medir la
confianza para elegir al candidato idóneo, para comparar entre los diferentes
candidatos? ¿Qué candidato es más
confiable? Para responder a estas preguntas se han montado todos los procesos
de selección que han existido. En la actualidad estamos en una revolución de la
información y no podría ser diferente en nuestro campo. Tenemos multitud de
canales de comunicación en los que podemos recabar información sobre los
candidatos, multitud de maneras de medir la confianza que podemos depositar en
un aspirante a un puesto.
Tradicionalmente
los profesionales solamente hemos tenido cinco formas de acreditar la confianza
que pueden depositar en nosotros, y los reclutadores de evaluarla, antes de
ponernos a trabajar.
-Nuestro currículum, lo que contamos sobre nosotros mismos. Lo responsables, formales
trabajadores y guapos que somos.
-Qué queremos para
nuestro futuro a corto, a largo plazo. ¿Nos lo puede proporcionar la
empresa? Si la respuesta es afirmativa,
si nuestros objetivos son comunes o complementarios, es una buena garantía de
nuestra conducta futura. Por
eso se empeñan en conocer "la zanahoria que nos mueve", no todo es
dinero.
-Títulos,
certificados, de la formación y de la experiencia que tenemos. Entidades de
prestigio que acreditan nuestros conocimientos.
-Recomendaciones
de jefes o compañeros, recomendaciones de personas de confianza de nuestro
posible empleador (prescriptores). Estas son las más valiosas porque hace que
la confianza se transmita como en una cadena y la confianza depositada en el
prescriptor avala la que pueden depositar en ti. "Este es el recomendao"
-Pruebas técnicas,
exámenes, oposiciones, dinámicas de grupo, problemas prácticos. Hace falta que
sean similares a las situaciones de trabajo para que sean buenas predictoras. Generalmente
en las últimas fases de selección por ser más costosas. Excepto en los ayuntamientos, donde pagas tú
las pruebas.
¿Se os ocurren otras variables
para evaluar la confianza?
Excepto la última; las pruebas técnicas que
es una evaluación directa de resultados, todas las demás variables que
utilizamos, son observaciones indirectas, lo
que digo, lo que dicen otros; que hice o haré.
Una
gran revolución ha acontecido: En la actualidad podemos ver lo que haces en vivo y en directo, y lo que
hiciste como si fuera presente. Escrito en tu blog o grabado en vídeo. Para
cualquier reclutador este aval es mucho más valioso que cualquier título o
recomendación.
El
mejor predictor de la conducta futura es la conducta pasada. ¿Qué vale más un vídeo en Youtube haciendo una presentación o el
título de un curso sobre hablar en público?
Así que
si quieres transmitir confianza, además,
de decir que sabes hacer algo mediante tu currículum o tus títulos, tienes que mostrar cómo lo haces. Por eso los reclutadores ante un
candidato, lo primero que hacen en teclear su nombre en Google. ¿Has preparado lo que se van a
encontrar?
Una
semana más muchas gracias por vuestra atención. Cualquier comentario será
bienvenido aquí en el blog o conectad conmigo en las principales redes
sociales. Por cierto, esta semana estoy de estreno, ya tengo dominio propio.
Muchos
retos y mucha suerte.
El enigma de la foto.
Este es un juego que os propongo con cada post, cada artículo tiene una foto
(la primera de todas) y os pido una interpretación, la que se os ocurra,
nada está bien o mal, nada es correcto ni incorrecto, y en el siguiente
artículo os cuento por qué razón la he puesto y cuál es mi interpretación. Esta
es la foto de la semana anterior: Nueva competencia imprescindible.
En la foto vemos la
puerta del castillo de Almansa, una metáfora muy apropiada para la empresa
tradicional, igual que su forma de comunicación es solamente por el
departamento comercial, así, un castillo solamente tiene un punto por el que
entrar y encima, protegido con mil trampas y artilugios. Las empresas tienen que romper sus murallas y
dejar que todos, trabajadores y clientes, emitan y reciban información para
aprovecharla y proporcionar mejores servicios.
¿Qué os
sugiere la foto de esta semana? Árboles sumergidos en las lagunas de Ruidera.