Revista Opinión

¿Qué cae primero la hoja o el árbol?

Publicado el 14 febrero 2018 por Carlosgu82

Si al final del camino tienes solo dos opciones y es necesario elegir entre ser como un árbol o imitar a una hoja, que ni siquiera se te ocurra dudarlo por favor no lo hagas, porque es tan obvio que no estas hecho para lo sencillo y sabes a la perfección que lo llega sin esfuerzo a nuestras vidas,  aquello por lo que no dejamos hasta nuestra propia piel, gotas de sangre o todo lo que tenemos si lo ameritará no es valorado y fácilmente desechado; tu eres tan valioso debes entenderlo, ya que no puedes quitarte importancia mucho menos si es para imitar a una simple hoja,  no sigas  los pasos de aquella hoja que vivió pero al llegar la adversidad perdió su vitalidad, su color o su sello por lo que eligió dejarse caer  separándose así de su fuente de alimento, pensó que el viento la llevaría consigo eternamente, confió en alguien pasajero y cuando noto que no era infinito su viaje junto a él puesto que toco el suelo con rudeza lo único que se le ocurrió hacer  fue arrepentirse hasta el cansancio, sin saber cómo volver o es que quizás nunca pensó en regresar, aquella hoja se resignó y se desvaneció porque fue más fácil creer en que iba contra su naturaleza volver a adherirse al árbol y dejarse llevar por la culpa de ser ella misma quien se soltó, prefirió quitarse valor para perseguir la tonta hipótesis de lo que según muchos es su naturaleza, lo considero más factible a que simplemente  tener fe en ella misma, trazar su propia realidad e intentar hacerla palpable ¿Qué le aseguraba que no lo habría logrado? ¿Fallo su naturaleza o ella por ponerse limitaciones? Es una verdadera lástima porque no supo comprender que  la perdida era nula puesto que aun en el más fatídico de los casos la victoria le pertenecía, se habría conocido en su totalidad y sí, es cierto que desaparecería pero sin ninguna duda, reproche, decepción o resignación por el contrario tendría una gran sensación de plenitud, de total paz consigo, pero sobre todo con la certeza de que siempre pudo dar más y que lo dio hasta el final.

No te resignes, me niego a que lo hagas y te dejes doblegar ante las circunstancias  ¿Por qué te empeñas en ser como esa hoja cuando realmente eres similar a un árbol frondoso? ¿Puedes al menos ver más allá de lo que aparentemente es un árbol? si no puedes visualizarlo y comprenderlo, entonces querido amigo debes modificar tu manera de apreciar las cosas te aseguro que tienen mucho más para decirte de lo que aparentan en la superficie; un árbol no es solo madera, hojas y raíces, así como tú no eres solo una silueta delimitada por huesos y carne ¿Qué define realmente lo que eres? De no tenerlo claro déjame decirte que los arboles te llevan la ventaja; para ellos solo un impulso es necesario para  crear de una frágil semilla un hecho real, fuerte, frondoso; lo irónico está en que son promovidos por lo que para ti seria dificultad, puesto que  esa semilla fue sepultada en un agujero donde todo lo que ve es suciedad, oscuridad y soledad que sencillo seria desesperarse en una situación como esa pero ella decide confiar y dar todo lo que tiene de sí e inicia un periodo de autoconocimiento donde sus raíces emprenden un proceso de nacimiento creando una estrecha relación con la tierra que antes era sinónimo de suciedad y ahora le tiende la mano para nutrirse pero más aún la fortalece, esa semilla no se despega a la esperanza de alcanzar la luz algún día, cosa que logra fácilmente por su constancia pero no se detiene ahí,  no se conforma con simplemente visualizar la luz como algo lejano si no que la usa en la fotosíntesis que además de aportarle la alimentación que requiere también  ayuda a los demás seres vivos produciendo el  oxígeno necesario para vivir.

Ese árbol creció porque entendió que cada parte que lo conformaba  tenía una razón de ser, que Dios no lo coloco ahí solo para adornar, confió y uso cada parte en conjunto, jamás las separo porque era tan valiosa la raíz como las hojas, la clorofila o el tronco, dejo que sus ramas fueran semejantes a sus raíces, es decir hizo visible lo que era en realidad, y de esa manera logro dar color, sombra, fruto y oxígeno a los demás.

Por si te lo preguntas tus raíces no son símbolo de estar siempre en un mismo lugar, lo que representan es lo que eres, piensas, sientes, crees, haces, las personas que conoces y lo que te enseñan , los momentos que vives, lo que hablas y lo que sueñas, asegúrate de conocerte para dejar de ser solo carne y hueso moviéndose por inercia, trabaja en conjunto porque nada te fue dado por error, muestra lo que eres no lo ocultes debajo de la tierra porque estas creado para ser visto ya que si algo que fue muy pequeño puede dar tanto, tu puedes dar mucho más y cuando sea el momento indicado sabrás como es tu forma de proveer.

¿Te animarías a que tu corazón, mente y alma trabajen como uno o prefieres caer por el viento?


Volver a la Portada de Logo Paperblog