Si eres uno de esos amos que no se detiene a revisar de uno por uno los ingredientes del alimento que ofrece a sus perros y gatos, no haces más que formar parte de la mayoría. Pero eso no quiere decir que esté justificado que dejes el asunto a ligera.
Sucede pues que existen múltiples ingredientes comunes en los alimentos envasados para perros y gatos que son potencialmente dañinos . Lo peor del caso es que estos ingredientes ni siquiera parecen plantear un riesgo tangible. Ese es el caso del maíz y la soja.
¿Por qué mi alimento contiene maíz y soja?
EL maíz y la soja son muy utilizados en los alimentos regulares para mascotas como sustituto de proteína. Estos granos son económicos y permiten, al menos en apariencia, que muchos fabricantes consigan con facilidad el mínimo de proteínas requerido en este tipo de productos. El problema es que, aunque ambos brindan cierta cantidad de proteínas, también aportan carbohidratos y de hecho, lo hacen en cantidades que superan con creces las de proteínas.
¿Cuál es la razón de limitar los carbohidratos?
Si bien es cierto que, al igual que en los seres humanos, los carbohidratos también proveen de energía a tus mascotas, la realidad es que esta no es de la mejor calidad. Como los granos de donde provienen están recargados de glucosa, lo que harán primero será elevar agresivamente los niveles de azúcar en sangre. Considera que los altos niveles de glucosa ponen a tus perros y gatos en riesgo de desarrollar diabetes, además, los predisponen a subir de peso sin control.
¿Y las proteínas?
Como tus mejores amigos son carnívoros, las proteínas derivadas del maíz y la soja no son lo más viable para complementar su alimentación, así que ahora que lo sabes, no sigas pensando que la soja le hará bien a sus músculos.
En todo caso elige alimentos con proteínas derivadas 100% de carne entera natural, nunca de sus derivados, que no implican más que comidas fabricadas a base de residuos que no aportan nada al organismo de tus mascotas y, por si eso fuera poco, que incluyen toda clase de ingredientes nefastos en los que no querrás pensar a la hora del almuerzo.
Más para decirle NO al maíz y la soja
No es raro que estos ingredientes se modifiquen genéticamente para que rindan mejor en las maquiladoras pero, además, a menudo se toman de campos bombardeados de hormonas y pesticidas que pueden acarrear alergias e intoxicaciones y quizá hasta desordenes tan serios como cáncer y enfermedades autoinmunes.
Ten cuenta también en que al ofrecer alimentos con este tipo de ingredientes a tus perros y gatos nunca tendrás una idea de cuan nutridos están, no sólo porque, como lo decíamos antes, la proteína que proveen es de pésima calidad sino porque las cantidades en las que la aportan dejan mucho que desear. Ocurre que un alimento cargado de maíz y soja apenas brinda un 50% de proteínas en cada ración, ya que el resto son carbohidratos, grasa, agua y ceniza vegetal.
¿Verdad que no se oye nada bien?
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