La vida se divide en pasiones y aficiones. En la primera se encuadra el ciclismo para todos nosotros, pues es el deporte que nos quita el sueño, nos atrapa durante horas y nos provoca satisfacciones En la segunda, se pueden situar todos los demás, pues el que nuestro ojito derecho sea el deporte de las dos ruedas, no quita para que nos guste ver y practicar otras modalidades.
¿Cuál es el problema que se plantea, en este sentido? Que algunas especialidades pueden ser incompatibles con el entrenamiento que hemos puesto en marcha o perjudiciales para los músculos, tendones y articulaciones que utilizamos de una mayor forma mientras pedaleamos, a las que puede ayudar a sobrecargarse. Por eso, en este artículo hablamos de algunos deportes que no sólo no son perjudiciales, sino que te aportarán beneficios, si lo tuyo es el deporte rey de la bicicleta.
Correr
Correr, el running, el footing, el jogging, o como usted lo quiera llamar, está de moda. La práctica de la carrera al trote, esa que requiere un esfuerzo, pero con una intensidad baja para no perder nunca el aliento, se ha convertido en el aliciente de muchas personas, que toman los parques por la mañana o por la noche para ejercitarse y tratar de superarse.
Mucho ojo, pues correr no es compatible con el ciclismo si no se realiza con ciertas garantías. Por lo tanto, si no cumples estas recomendaciones es preferible que no practiques este deporte. Pero, si las sigues a rajatabla, será una buena rutina para mantener tu forma física intacta sin necesidad de no subir a la bicicleta, si es que algún día o alguna temporada no lo requieres. ¿Cuáles son estas condiciones?
En primer lugar, el utilizar un calzado adecuado, que se ajuste al pie y que tenga una buena capacidad de amortiguamiento. De lo contrario, determinados tejidos de tus pies podrían quedar afectados. Por otra parte, es fundamental que corras por una superficie blanda, como puede ser la arena o el césped. El esfuerzo que efectúes durante la actividad será mayor; sin embargo, tus articulaciones sufrirán menos.
Por otro lado, aunque te notes en un estado de forma pleno, no cometas el error de afrontar series de atletismo que requieran una gran carga física, puesto que no es el objetivo del footing, ni estarás preparado para ello, ni mucho menos te ayudará a entrenar como pretendes. Marca un ritmo asumible, disfruta de este deporte y no trates de igualar a Michael Johnson, pues sabes que lo tuyo va más encaminado a triunfar en la montaña.
Natación
La natación es un deporte extraordinario y muy compatible con la práctica ciclista. Dispone de una esencia aeróbica muy importante que contribuirá a que mantengas tu estado de forma. Eso sí, al igual que ocurre con el running, no debes cometer el error de desgastarte en los primeros largos, pues el ejercicio más completo en la piscina será el de marcar tu propio ritmo y aguantar en actividad todo lo que tu físico te permita.
En caso de que sufras algún tipo de dolencia en la espalda, este deporte es especialmente recomendable, pues no sólo ayuda a estirar todas y cada una de las partes de esta zona, sino que también contribuye a fortalecerla, lo que, sin duda, te beneficiará encima de la bicicleta.
Patinaje en línea
El patinaje en línea presenta un parecido con el ciclismo realmente interesante, y resulta especialmente interesante para mantener los cuádriceps en una buena forma. Por otra parte, la postura inclinada que requiere es muy positiva para fortalecer la zona lumbar, lo que te ayudará cuando estés encima de la bicicleta y retrasará la aparición del dolor.
Por su naturaleza, en el que las piernas van protegidas por las ruedas, que son las que asumen la mayor parte de la carga, resulta bastante inocuo para tendones, articulaciones y músculos; de ahí que, al practicarlo, no debas temer por posibles lesiones, salvo que te excedas.