¿Qué es el ADN lila del Bàsquet Femení Sant Adrià?

Sergi Calatayud, Cala, gestiona @SeReLila1, la cuenta de un grupo de entusiastas que entrenan en el club y que apoyan también desde la grada

Sergi Calatayud, en el centro, en la Copa de la Reina de Zaragoza. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

Toni Delgado / Sant Adrià de Besòs

Es la primera vez que pacto una entrevista y no sé con quién.—¡Seguro que me conoces! Jajajaja. Salgo en las medias partes de los partidos televisados  –me escribe @SeReLila1 en Twitter. Le pido una pista. —Llevo barba.

¡Ah! Inconfundible. 

En el Bàsquet Femení Sant Adrià nadie conoce a Sergi Calayatud por su nombre. Es Cala, el primer entrenador del premini, que lleva con Mar Tejedor y Núria Grau; el ayudante de Àlex Àlvarez en el júnior B; y alguien que pone su granito de arena en el sénior B, de Copa Catalunya. Cala contagia su energía, es un libro abierto y probablemente desconoce el significado de la palabra excusa. Gestiona la cuenta @SeReLila1, que representa a un grupo de incondicionales del Bàsquet Femení Sant Adrià en la grada, la pista y fuera. Todos y todas entrenan en el club: "Nos organizamos e intentamos ir a ver el número máximo de partidos de todas las categorías del club para que todos estén arropados. Mi récord son nueve encuentros de baloncesto en un día. Me gusta ver a los equipos de la entidad". 

Judith, Judith, Marta y Andrea, jugadoras del cadete A, Àlex, entrenador del júnior B y ayudante de Glòria Estopà en el cadete A y Ricky Gómez, ayudante también en el cadete A, y Cala. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

—Antes he estado en otros clubes, pero ahora me siento lila  –sigue Cala. 

Se siente lila y orgulloso. Ilusionado. También cuando sus jugadoras del premini saltan a la pista en los tiempos muertos de los partidos televisados. Hoy, ante el Araski, no será el caso. 

—Les tiro la pelota y... Cómo disfrutan... Sobre todo las primeras veces, se enganchaban varias jugadoras en la pelota y casi se pasaba el tiempo. En el partido contra el Valencia Basket se les escapó el balón y le fue al entrenador ayudante [visitante], Santi Pérez, que puso una cara de "estamos en tiempo muerto". Disfruto mucho por ellas, aunque tanto Joana Orive como yo estamos un poco en tensión por si hay algún contratiempo.  

A Cala le haces una pregunta y te contesta tres. —A mis niñas se les cae la baba con Mire [Vila], delegada del júnior, y compañía. El otro día teníamos al lado a Meighan [Simmons] ejercitándose con Bachi [Víctor Ciavattini, el preparador físico del primer equipo]. Y una niña le decía a la otra: "Ésta es la que mete tantos puntos con el sénior. ¡Yo también quiero!".  

Cala atándole los cordones a una jugadora suya en un tiempo muerto del Bàsquet Femení Sant Adrià-Araski del curso pasado. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords.

Le pregunto por su experiencia en la Copa de la Reina en Zaragoza. En enero. La primera en la historia del club. 

—Para mí la Copa... Se detiene y viaja casi un año atrás, a otro partido contra el Araski en el Marina Besòs. Cala recuerda que vio a las jugadoras "muy serias". Eso le dio mala espina. "Hoy no irá bien... El pabellón está lleno. Hay mucha presión...", pensó, a pesar de que es muy optimista. El equipo hizo que se olvidase rápido del mal presentimiento. 40-18, al descanso. La máxima ventaja fue de 40 puntos. 78-47, al final.—¡Fue una fiesta! Cantamos: "¡Nos vamos a la Copa! "¡Sí, sí, Zaragoza ya está aquí". Después, en la cena... ¿Sabes qué le canté a Belén Arrojo? "¡Lucas, llama a Belén!". Y Mondelo no tardó en hacer esa llamada para convocarla para la selección española absoluta por primera vez. Me alegro mucho por ella. Se lo merecía por su trabajo y talento, y también por tener siempre un momento para las niñas. 

Comunión total en la Copa entre jugadora y público. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords.

Ahora sí, la Copa de Zaragoza.  

Cala llegó en AVE con su amigo Gerard, también entrenador del club. En la estación Zaragoza-Delicias se pusieron a cantar: "Tots som liles! Tooooooots sooooooom liiiiiileeeees!". En el pabellón Príncipe Felipe, Cala dirigió a la afición del Bàsquet Femení Sant Adrià, que no fue la más numerosa, pero puede que sí la más carismática y ruidosa. Al entrevistado sólo le faltó sacarse la camiseta. Se dejó el alma. La garganta. Todo.Lo teníamos justo detrás de la zona de prensa. —Parecía que estabas casi volando  –le comento. Me callo lo que pensé en Zaragoza. Sentí envidia de su infinita pasión.  

Cala, en el Marina. "Lluitar. Gaudir. Somiar". [Luchar. Disfrutar. Soñar]. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords.

—Estaba poseído. Como dice Héctor [Rico, secretario de Ruxidos de Esteiro, la primera peña del Uni Ferrol. Otro fiel entusiasta]. En la media parte del partido de cuartos de final ante el Stadium Casablanca lo veíamos negro y Nieves, la mujer de Àlex, me dijo que no me callara: "Cala, si te caes por animar demasiado, yo te cojo". ¡Casi me como la valla tras un triple de Belén Arrojo y protestando una acción al final! ¿Perdimos? Sí, pero le dedicamos cánticos a todo el equipo: a Fabián [Téllez], a [Julia] Reisingerova, a [Andrea] Riley, a [Belén] Arrojo... Cenaron con las jugadoras y se fueron de fiesta. Eso sí, a las cinco y pico de la mañana Cala ya estaba esperando el AVE en la estación. Tenía partido a las cuatro de la tarde en Barcelona. Ganaron. Un rato después le sonó el móvil. Un par de WhatsApp, dos vídeos de jugadoras del infantil A. "Por favor, Cala, ven a animarnos a la final de la Mini Copa mañana, por favor...", le pedían. El Sin Excusas se montó en un autobús y cuatro horas después estaba de nuevo en Zaragoza. Esa noche, de fiesta, conoció a Héctor Rico. Se cayeron bien. Normal. 

Miembros de @SeReLila1 y más afición del Bàsquet Femení Sant Adrià durante la Copa. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

Volvamos al presente. 

—¿Qué prometo hoy? Animar como un animal... O eso espero. —Te conozco en tu mejor versión, Cala...  —¡La de Zaragoza! A veces somos muy tribuneros, eh. Los y las @SeReLila1 se agencian de dos tambores con el partido ya empezado. Cantan, animan... Espíritu sano. 

Algunos miembros de @SeReLila1 y refuerzos. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords.

Àlex y Cala. Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords.

—42-35 a favor al descanso. Esto no lo hemos vivido en todo el año. El equipo tiene... ¡Chispa! Esa chispa nos hará escalar posiciones en la clasificación. ¡Está clarísimo! Hoy todas suman en ataque, en defensa, en rebotes... Esto es el ADN lila, el ADN de Glòria Estopà, el ADN del equipo, el ADN del club... –celebra.—Cala, si se te cae la gota en la media parte, no sé cómo acabarás. —Sudado, Toni, sudado. —Ya lo estás. —¡Pues mucho más! Cuando @SeReLila1 damos un par de gritos fuertes, el Marina se arranca. ¿Sabes? Me gustaría comprar un  megáfono con MP3, pero vale bastante dinero. El mismo problema tenemos para montar la peña... —¿Nos das una pelota?  –le pregunta una de sus jugadoras del premini.—Hoy no toca salir hoy, Júlia. Toni, como puedes comprobar, ya he torcido la maza de tanto darle al tambor. Voy a comer y beber un poco. Si no lo hago, no aguantaré el ritmo.  

Pobre maza... Foto: Toni Delgado / Cronómetro de Récords. 

El refrigerio le sienta bien. No deja de animar y de darle al tambor. Igual que el resto del grupo. El Marina aplaude un costa a costa de una Laura Peña desatada, otro triple de Meighan Simmons, se preocupa porque Mariam Coulibaly se marche cojeando tras una mala caída y una excelente actuación. Final: 78-64 a favor del Bàsquet Femení Sant Adrià en su mejor partido junto al disputado ante el Valencia Basket. Segundo triunfo del curso. 
En la pista Cala se saca el vendaje de su mano. La ampolla da miedo. 

—Pero si es una ampolla de nada. ¡Hemos ganado, Toni! ¡ADN lila! Cala nació lila, aunque no se dio cuenta hasta que aterrizó en el club.

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