Habitualmente, cuando se escucha la palabra esoterismo, la mayoría de la población se traslada mentalmente a un mundo de adivinadores, seguidores de cultos extraños o en el mejor de los casos a astrólogos o practicantes de terapias alternativas. Sin embargo el esoterismo es algo distinto a la imagen popular que se tiene de el.
El ser humano tiene dudas sobre si mismo y su propia existencia, en consecuencia, desde el albor de los tiempos ha tratado vanamente de satisfacerlas haciéndose preguntas como ¿quién soy?, ¿existe la vida después de la muerte?, ¿por qué nunca soy feliz?, ¿cuál es el sentido de mi vida? Y en general preguntas que tienden a manifestar levedad del ser.
Para responder a estas preguntas y abrigar nuestras esperanzas volvimos la vista a los dioses, buscando en esa imagen sobrenatural, el orden cosmológico y para que este continúe con ese orden, satisfacíamos a esos dioses en base a una disciplina o sentido del bien y del mal y el Sol, fue nuestro primer dios, con posterioridad, esta primacía del sol sobre los demás dioses conceptuales dio paso al monoteísmo imperante en la actualidad, sus primeras manifestaciones fueron Atón en Egipto, Helios en Grecia, Inti en el imperio inca, etc.
Pero pronto, conforme avanzaba la cultura y la filosofía, la idea de un dios con “decisiones” inteligentes que cambiaba la vida en la tierra, dejaba de tener sentido y esa filosofía que minaba la idea de dios, tampoco nos da respuestas.
Sin embargo, un hilo conductor entre las primeras creencias, la filosofía y las actuales teologías, nos indican que hay una Tradición universal, una Tradición que se puede conocer mediante el estudio y la meditación introspectiva. Un Tradición que solo necesita, estar preparado, y un pequeño impulso que abra la mente al conocimiento: La iniciación.
El esoterismo, es el estudio de una serie de conocimientos y valores presentes en todas las culturas y pueblos a través de la historia, base de todo saber filosófico y de toda teología y que da respuesta de un modo global a las dudas referidas al mundo que nos rodea y su realidad, a nuestra propia participación en el universo y a nuestra relación con el.
El esoterismo defiende que existe otra realidad no física, difícilmente observable por los sentidos, pero que todos íntimamente sabemos que existe. Defiende asimismo, que el ser humano es mas que el cuerpo físico, que tenemos cuerpos sutiles que se interrelacionan entre si. Cree que los humanos tenemos la capacidad de percibir la realidad ultima y que esta percepción de la realidad es la finalidad ultima de nuestra existencia terrenal.
Para iniciar el camino de comprensión del esoterismo es necesario, el estudio, la introspección y la iniciación, siendo este el momento en el cual, el ser humano recibe por revelación o descubrimiento el punto de inflexión que le permite avanzar por esta senda de conocimiento.