Aunque su creación se contempla en el Tratado de Lisboa, que entró en vigor en 2010, ésta se hizo efectiva en enero de 2011. Se encargaría de la Política Exterior de la Unión Europea, en coordinación con los servicios diplomáticos de los Estados miembros, y realizaría las siguientes funciones: contribuir a la paz en el mundo; vecindad responsable; ayudar al desarrollo de terceros países; defensa de los Derechos Humanos; colaboración con la ONU; fuerza para la seguridad global; respuesta a crisis humanitarias; acción contra el cambio climático; acuerdos comerciales; y la expansión de la Unión Europea.
Trabaja en coordinación con la Comisión Europea en aquellas áreas que son competencia de esta institución como ayuda humanitaria, cambio climático o desarrollo.
Depende de las resoluciones del Consejo de la Unión Europea, en su formación de ministros de Asuntos Exteriores, en aquellos aspectos que siguen siendo competencia de los Estados miembros.
El Parlamento Europeo ejercería un control presupuestario del SEAE y la Alta Representante presenta informes sobre la actuación de la Institución que se debaten tanto en las sesiones plenarias como en las correspondientes comisiones parlamentarias: comisión de Asuntos Exteriores; comisión de Comercio Internacional; y Comisión de Desarrollo. Además colaboran con las 34 delegaciones interparlamentarias del Parlamento Europeo.
Existirían 139 delegaciones diplomáticas de la Unión Europea. Éstas se encuentran tanto en países de fuera de la Unión Europea, de todos los continentes, como en otras organizaciones supranacionalescomo Naciones Unidas, UNESCO, la Unión Africana o ASEAN.
Más información pinchando aquí.
Podéis conocer más sobre la Política Exterior y de Defensa de la Unión Europea a través del curso que habrá sobre el tema en Santander.
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