El test de hartman consiste en una colección de frases en las que la persona ordena dos series de secuencias de 18 frases teniendo en cuenta su escala de valores y que sirve para medir aspectos de la persona que se somete a él, entre los que se encuentran los físicos, mentales y emocionales. Hace una escala de valores de los individuos.
Debido a que somos lo que pensamos, somos lo que valoramos y sentimos, el test de hartman indirectamente también valora lo que es la persona en cuanto son sus valores. Muchos psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales y otros especialistas de salud mental utilizan el test de hartman como medio para estudiar a sus pacientes y conocer sus estados de salud mental, física y emocional.
Las dos áreas en que se estructura el test de hartman son el mundo externo y el mundo interno, siendo el primero la valoración de cómo la persona se relaciona con el mundo y la segunda es cómo se relaciona con sí misma.
Es muy importante valorar la estructura del mundo interno de la persona, ya que permite conocer cuestiones interesantes como la dependencia o independencia del individuo, su alta o baja estima, cómo es capaz de resolver los conflictos, cuál es su equilibrio emocional, si se encuentra en estados de ansiedad u otras cosas. Todo esto también se relaciona con el mundo externo de la persona con el que conecta a diario, ya que una cosa influye a la otra y la otra en ella.
No son preguntas a la persona sino que se trata de ordenar valores. Una vez realizado el test, el profesional valora todos los aspectos importantes de la persona en base a los resultados. El conocimiento de uno mismo permite a la persona ser un poco mejor en todos los aspectos y afrontar mejor las cosas.