La TERNURA, es como un movimiento que nos arrastra hacia un camino
repleto de sensaciones y de sentimientos en los que se entremezclan la
benevolencia, la aceptación y la calidez; pero también la confianza, el
estímulo, el asombro y los nuevos descubrimientos.
Para seguir este
camino, lo único que hay que hacer es abandonar nuestros miedos, dejar
atrás los prejuicios y enfrentarnos a todo cuanto pueda separarnos. La
ternura es el nacimiento hacia uno mismo, un nacimiento que nos permite
penetrar en el maravilloso vientre de la existencia humana.
La
ternura no es solamente algo físico. Es una emoción sutil, una mirada de
asombro, un movimiento cálido unido para siempre al conjunto de los
sentidos. La ternura posee un brillo propio.
Para nacer, la ternura
necesita del silencio. El silencio que se crea cuando escuchamos lo que
dice la otra persona o intentamos participar de sus vivencias y
sentimientos.
La ternura es un camino que nos conduce hacia la
multiplicidad y la abundancia espiritual. La ternura siempre va unida a
una semilla que está a punto de germinar y se hace mayor, paulatinamente
hasta llegar a convertirse en artífice de un encuentro.
La ternura es la expresión más serena, bella y firme del amor. Es el
respeto, el reconocimiento y el cariño expresado en la caricia, en el
detalle sutil, en el regalo inesperado, en la mirada cómplice o en el
abrazo entregado y sincero.
(Mensaje tomado desde la página de mi amiga Maria Suarez)
LOS COMENTARIOS (1)
publicado el 18 marzo a las 22:48
esto no me sirvio de nada
publicado el 01 junio a las 19:51
es tu definición de la ternura? muy bella y exacta
publicado el 17 septiembre a las 22:33
la lectura es bonita tambien de ja una enceñasa porque como la enceñansa que deja y tambien ba para dodas la enceñansa