¿Qué es ser revolucionario? #Cuba #CubaEsNuestra

#Cuba #CubaEsNuestra Un día un hombre fue golpeado, crucificado, marginado de su pueblo y desangrado por los que él mismo ayudo. Un día, hubo un hombre que dejo sus riquezas, y se fue por los mares en busca de nuevas tierras.

Un día un hombre se alzó en armas en amor por su tierra, libero a sus esclavos y se fue a la contienda… Un hombre no cesó de escribir y preparar una batalla por la independencia… Pero un día un hombre dejo su burguesía y religión para aventurarse en un barco hasta los más inhóspitos rincones de las montañas…

Y me hago una pregunta; ¿Qué es ser revolucionario? Y siento el deber de ponerles cascabeles a gatos que no lo son, y a perros que se volcán ante sus amos. Los revolucionarios tienen que cumplir su deber. A veces tiene que decir cosas que no resultan agradables, tiene que hacerlo; no se concibe que esté fingiendo, haciendo demagogia en algo. El estatuto del carácter, o la personalidad de un revolucionario no está legislado en el Partido Comunista de Cuba, ni en las leyes fiscales o constitucionales.

Pero, ¿cómo se logra ser revolucionario? Ser revolucionario no es hablar para ganar amistades y fama en Facebook y dejar de denunciar problemas, acto propio de personas inescrupulosas, que seguramente, y lo afirmo, no son revolucionarios.

Ser revolucionario, nuestro comandante lo definió genialmente, en su Concepto de Revolución y es que desde no mentir y defender valores, hasta cambiar lo que se debe ser cambiado, está la clave de lo que es ser un revolucionario.

Ser revolucionario no es atacar a personalidades del gobierno porque no estas conforme con su dirección, y luego hablar a sus espaldas sin llegar y señalar, indagar, respetar, persuadir y discutir, como un verdadero revolucionario.

Ser revolucionario no es llegar a una cola, a una parada de ómnibus y empezar un tema para ganar afectos. Ser revolucionario no es el hecho real de no asistir a un acto político porque afirmas que no son tus ideas, y es que Un revolucionario no abandona jamás la lucha, como no deja jamás de soñar. Martí era un revolucionario de su tiempo, como lo mismo lo fue Einstein, como lo mismo fue Martin Luther King, Fidel Castro, Ernesto Che Guevara, Julio Antonio Mella, Guiteras… y es que son esos los verdaderos revolucionarios, que abandonan su comodidad, sus riquezas, por dar su vida por el proletariado.

Ser revolucionario es no esperar nada a cambio, es el que verdaderamente ve en su sacrificio el bien de su patria, el revolucionario no vende su patria, no la desdeña, la coloca en pedestal. La crítica para formarla, para educarla en el bien, y no en el mal.

No la encadena a los que harán de esta isla un burdel de los ricos. Y esta es la idea que un revolucionario, un verdadero revolucionario sigue, y debe defender a cualquier costo. Hay quienes se creen poderoso sabios e ignoran que el sentido más real del revolucionario está en el pueblo, pero no manipular estas ideas para traicionar a la patria.

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Universidad de Granma, Bayamo. M.N.

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