Un accidente cerebrovascular o ACV, también llamado "derrame cerebral", se caracteriza por la interrupción brusca del suministro de sangre al cerebro. Es una de las principales causas de muerte en la Argentina.
Sucede cuando un vaso sanguíneo del cerebro se bloquea o rompe. Si se detiene el flujo sanguíneo durante más de unos pocos segundos, el cerebro no puede recibir sangre ni oxígeno. Las células cerebrales pueden morir, y los daños dependen del área del cerebro que haya sido afectada.
Es importante detectarlo a tiempo para poder actuar. Los síntomas más comunes para reconocerlo son la repentina pérdida en la capacidad del hablar, parálisis corporal en la mitad del cuerpo y ceguera súbita.
Los tipos de ACV
Hay dos tipos principales de accidente cerebrovascular: el ACV isquémico y el ACV hemorrágico.
El ACV isquémico ocurre cuando un vaso sanguíneo que irriga sangre al cerebro se bloquea por un coágulo de sangre. Puede ser resultado de la ateroesclerosis (taponamiento de las arterias). La grasa, el colesterol y otras sustancias se acumulan en la pared de las arterias formando una sustancia pegajosa llamada placa. Con el tiempo, la placa se acumula. Esto a menudo dificulta el flujo apropiado de la sangre, lo cual puede provocar que ésta se coagule.
Un coágulo de sangre formado en el corazón puede viajar a través de la sangre y atascarse en las pequeñas arterias del cerebro, lo cual se conoce como embolia cerebral.
Un ACV hemorrágico ocurre cuando un vaso sanguíneo del cerebro se debilita y se rompe, y la sangre se escapa hacia el cerebro.
Los factores de riesgo
La hipertensión arterial es el factor de riesgo número uno para accidentes cerebrovasculares. Ocho de cada diez personas que en la Argentina tienen un ACV son hipertensos, y un 80 por ciento de ellos no sabe que tiene hipertensión.
También aumentan el riesgo factores como diabetes, antecedentes familiares de ACV, cardiopatía, colesterol alto, aumento de la edad, consumo de alcohol, trastornos hemorrágicos, el uso de ciertos medicamentos.
Cómo prevenir el ACV
* Haga una dieta saludable y equilibrada: baja en grasas y azúcares, alta en frutas y hortalizas, y poca sal.
* Haga ejercicio regularmente: 30 minutos diarios si no tiene sobrepeso, y de 60 a 90 minutos si lo tiene.* Controle su presión arterial periódicamente.
* Chequee su colesterol. El colesterol "malo" o LDL debe estar por debajo de 100 mg/dL.* No beba más de 1 ó 2 vasos de alcohol por día.
* Deje de fumar.
* Reduzca el estrés.