¿qué fue de baby jane?

Título original     What Ever Happened to Baby Jane?
Año      1962Duración    133 min.País     Estados UnidosDirector     Robert AldrichGuión      Lukas Heller (Novela: Henry Farrell)Música     Frank DeVol (AKA Frank De Vol)Fotografía     Ernest Haller (B&W)Reparto      Bette Davis, Joan Crawford, Victor Buono, Wesley Addy, Julie Allred, Anne Barton, Marjorie Bennett, Bert Freed, Anna Lee, Maidie Norman, Dave Willock, William Aldrich, Russ Conway, Maxine Cooper, Robert Cornthwaite, Michael Fox, Gina Gillespie, Barbara Merrill, Don RossProductora     Warner Bros. Pictures

"La de laaaaa mochila azuuuuuuul"

Dos alegres y pizpiretas niñas eran "lo más" en Hollywood y parecía que ambas hermanas iban a ser dos estrellonas de la meca del cine, pero fueron creciendo y mientras Blanche se convertía en toda una actriz de éxito, Jane no tuvo la misma suerte y quedó relegada a intérprete de producciones menores. Y esto le avinagró el carácter y tenía una mala hostia como un escuerzo lagunero y se moría de envidia de ver lo bien que le iba a su hermana por la que no sentía mucho aprecio. Hasta que un misterioso accidente de coche hace que Blanche quede en silla de ruedas y entonces Jane saca la mala hostia que he mencionado antes y no hace nada más que putearla haciéndole pagar los platos rotos de su mediocre carrera...

"Deja de tocar la armónica que me tienes la cabeza loca"

Tras muchos años de persecución, por fin me decidí a ver esta gran película, una de las cintas por las que Bette Davis pasaría a la posteridad, tal vez sea la más icónica por esa cara de "ida".
Y la verdad es que la señora Davis se marcó un papelazo dotando a su personaje de la dosis de locura suficiente como para mostrar los estragos de la no aceptación de Jane de su paso de estrella infantil fulgurante a actriz de medio pelo y la decadencia se refleja perfectamente en su cara desencajada y su expresión atormentada, cercana a la demencia.
Jane castiga a Blanche haciéndole pagar los platos rotos de su triste vida que rueda irremediablemente cuesta abajo, y lo hace en un ambiente raruno, claustrofóbico, embargado por el odio que rezuma por todos y cada uno de los poros de su piel.

Jane era tan mala que no le dejaba ver los San Fermines a Blanche

No estaba como una chota. No, que va.

Es de justicia mencionar también la gran interpretación de Joan Crawford en un duelo magnífico con Bette Davis, aunque ésta última llama más la atención por la aparatosidad de la locura de su personaje. Crawford es la hermana sensata, la hermana buena, la hermana agradecida por haber tenido la oportunidad de triunfar, pero Blanche la ve como "el enemigo", como la niña que creció y le pasó por encima, arrebatándole su fama.
Es una película bastante turbadora sobre los efectos de una mente extraviada y fuera de sí, casi terrorífica y magníficamente rodada que hace que el espectador asista a la confrontación fraternal (de hermanas, no de "ay cuanto te quiero Jane").
Todo un clásico que no puede faltar en toda colección de cinéfilo que se precie.