Supongo que si la última semana has pasado por aquí, habrás visto que tengo nuevo blog. En él quiero hablar de la experiencia de mi futura maternidad y actual embarazo. Por eso de no mezclar temas, ya me conoces, todo ordenadito queda mejor. Y como otra de mis pasiones es el posicionamiento... empecé a optimizar el nuevo blog para, poquito a poco, ir escalando puestos en los diferentes rankings y tener un SEO aceptable.
Todo iba bien (dominio propio, redireccionamiento, Google Analytics, Webmaster Tools, keywords...) hasta que le tocó el turno a Alexa. Tengo varios tutoriales sobre el tema pero... ¡ya no sirven para nada! Bueno, servir sirven... pero ¡menudo cambio! Puedes verlos aquí:
Tutoriales sobre posicionamiento web en Alexa
Si los recuerdas, o les has echado un vistazo por encima ahora mismo ¡vas a flipar como yo! Fui tan feliz y decidida a añadir mi nuevo blog a mi panel de administración para tenerlo controladito y... ¡sorpresa! Me encontré con ésto:
Lo primero que pensé, inocente que es una, fue: "¡Vaya, se han actualizado! Que bien". Entre a mi cuenta y ¡sorpresa!
Al pinchar en Añadir mi Sitio, el botoncito verde de Ver Planes y Precios ya me mosqueó un poco. ¿Ya no podía acceder al plan gratuito básico como antes? Me dejé llevar por la curiosidad y pinché, después de añadir la URL de mi nuevo blog.
¡Tachán! Mi gozo en un pozo... con el Plan Básico tenía un mes gratis pero, a partir del segundo mes, ya eran 9.99 dólares al mes. A ver, si hay que pagar por un servicio se paga... pero yo solo quería añadir mi sitio para configurar el lenguaje (español) y la ciudad (Madrid) para poder acceder a esos datos y controlar un poco las subidas y bajadas.
Yo entiendo perfectamente que es un negocio y que de algo tienen que vivir, que para eso se pasan horas currando delante del ordenador para que nosotros podamos disfrutar de los resultados. Pero fastidiar, pues fastidia.
Parece que las URLs que ya estaban añadidas, siguen ahí sin cobrar nada, pero no me dejaban de ninguna de las maneras añadir la del nuevo blog. Que, por cierto, ¡como se ha notado que he disminuido el ritmo en mi posicionamiento! A la vista queda que mi idea de que el seo debe ser algo constante es real como la vida misma. Pero vamos, cuando me recupere, en unas semanitas dando caña ¡me recupero!
Y sí... alguien tan obsesionada con el orden, los datos y la organización como yo... no podía quedarse sin optimizar su nuevo blog por 10 cochinos dólares al mes. Sopesando pros y contras, ganaron los pros, como siempre que medito sobre mejoras para el blog...
Ahí está, mi nuevo blog a la espera de que sea confirmado, pero eso sí, ya optimizado para saltar a la palestra cuando Alexa me de el toque de salida.
Ya te iré contando si el pago del servicio merece la pena, espero que ofrezcan más datos que en la anterior versión gratuita.
¿Tu usabas Alexa? ¿Te habías dado cuenta del cambio?
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