Probablemente haya escuchado o leído alguna vez los términos “dinero inteligente”, con el que se definen a los inversores institucionales o gestores profesiones, cuya información y calidad de análisis es consistentemente mejor que las del resto de los inversores, y cuya probabilidad de ser exitosos en el mercado es también más alta.
¿Pero cómo actúa ese dinero inteligente?
El analista Jeff Clark nos da la respuesta.
1. El dinero inteligente compra cuando los otros tienen miedo. Un buen ejemplo de esto fue el último desastre petrolífero del Golfo. La especulación sobre el tamaño de los efectos negativos de este desastre en British Petroleum causó un pánico de ventas. La acción perdió casi la mitad de su valor en menos de dos meses. Para utilizar un lenguaje clásico, había sangre en las calles, y por tanto, era el momento de comprar. El inversor que los hizo actualmente tiene unas ganancias de un 50%, y parece que las acciones seguirán subiendo.
2. El dinero inteligente vende cuando otros son codiciosos. Mi colega Doug Horning es un ejemplo perfecto de venta cuando otros son codiciosos. En la histeria del Nasdaq de finales de 1990, Doug había acumulado un gran número de acciones de Internet y observó su cuenta de valores en unos niveles que no había visto nunca antes. La codicia a su alrededor era palpable. “Yo ya he tenido suficiente”, me dijo “mi posición ha registrado ganancias espectaculares, y esto no puede durar para siempre”. Vendió sus acciones de Internet antes del pico de 2000, cuando la codicia alcanzó su máximo.
3. El dinero inteligente ve tendencias donde otros no. Doug Casey recomendó a sus lectores en 1999 que compraran oro, basándose en su investigación y en sus estudios de mercado. Pero el su recomendación no tuvo aceptación. Nadie quería hablar sobre las acciones de metales o minerales. Muchas de las acciones recomendadas han doblado su precio.
4. El dinero inteligente ignora los titulares. Más allá de los consejos tradicionales de “compre con el rumor y venda con la noticia”, el dinero inteligente hace caso omiso de las tonterías de los medios de comunicación, y en su lugar se centra en los factores que motivan esos titulares. Cuando los titulares aparecen en los periódicos, el dinero inteligente ya estaba invertido, y está buscando cuales serán los titulares de mañana.
5. El dinero inteligente apuesta por las grandes tendencias, no por los giros de mercado. ¿Qué tienen Jim Rogers, Marc Faber, Rick Rule, Doug Casey y Warren Buffet en común? Ellos saben identificar los factores fundamentales que crean las tendencias. Compran grandes posiciones en los valores que se beneficiarán de esas tendencias, y las mantienen. No necesitan análisis técnicos, ni líneas de tendencias, ni señales de medias móviles…Y ellos no se asustan ante las primeras caídas de los precios.
6. El dinero inteligente no cuentan el dinero antes de hacerlo. Estos inversores comprenden que no hay cosas seguras, y que nadie les va a rescatar de sus análisis si resulta equivocado. Ellos mantienen una expectativa realista. Y si tienen una posición perdedora, aprenderán de ella y no se negarán a invertir de nuevo.
7. El dinero inteligente hacen caso omiso de los informes sociales del gobierno y dependen de sus propias investigaciones.
Con esta descripción de dinero inteligente, la siguiente pregunta es ¿qué están mirando ahora?
Para responder esta pregunta, el dinero inteligente intenta comprender el escenario de largo plazo que tienen delante de ellos. No están interesados en lo que los acontecimientos de la próxima semana o el próximo mes. El dinero inteligente mira las tendencias probables en los próximos años.Los inversores inteligentes se hacen preguntas como estas:
¿La inflación real subirá o bajará en los próximos años? ¿Los tipos de interés subirán o bajarán en los próximos años? ¿El dólar se fortalecerá o se debilitará en los próximos años? ¿Cuál es la mejor manera de protegerse contra las fuertes deudas y un gasto público fuera de control? ¿Cuáles son los activos en los que hay más probabilidad de ganar dinero en los próximo años? ¿Cuáles se deben evitar? ¿Es hora de invertir en bienes raíces de nuevo? ¿La economía global será sólida en los próximos años? ¿Es el petróleo la mejor inversión en energía? ¿Están el oro y la plata en burbuja, o seguirán subiendo?
La respuesta a estas preguntas determinará en que invertirá el dinero inteligente en los próximos años.
Carlos Montero