Seguro que alguna vez te has preguntado qué hacer si tu hijo tiene fiebre. Lo primero es saber que la fiebre a pesar de ser un síntoma de enfermedad no es algo malo, debido a que juega un papel fundamental en combatir infecciones, causadas tanto por virus como por bacterias.
Si la temperatura corporal de tu hijo alcanza los 37,5 ºC o bien 38 ºC podemos hablar de fiebre, pero no debes alarmarte debido a que ésta es un mecanismo de defensa del organismo y podemos tomar medidas en casa para conseguir controlarla.
Sin embargo, es importante hacer un seguimiento de la temperatura del niño para ver cómo evoluciona. Utiliza un termómetro adecuado para la edad de tu peque y toma nota de las mediciones en caso de que tengas que acudir al pediatra si la fiebre no remite, lo que ayudará a este profesional a determinar la causa de la subida de temperatura.
Consejos para ayudar a bajar la temperatura de un niño
Es importante que tengas en cuenta, que la fiebre suele aparecer con frecuencia durante los tres primeros años de vida, para ayudar a fortalecer la inmunidad del peque. Lo primero que debemos hacer es intentar bajar la temperatura del niño con algunos cuidados sencillos, por ejemplo:
- Si tu hijo tiene fiebre debe llevar ropa ligera, no debes abrigarle demasiado.
- Hidrata a tu peque, es importante que beba frecuentemente líquidos. Ofrécele constantemente agua y/o zumos naturales.
- Igualmente puedes refrescarlo con un baño de agua tibia, evitando por completo el agua fría.
- Déjale tiempo para descansar, la fiebre suele ir acompañada de cansancio físico.
Adicionalmente, existen medicamentos para el tratamiento sintomático de la fiebre, siempre teniendo en cuenta que su dosificación debe realizarse en función del peso del niño. Una opción es Nurofen Pediátrico suspensión oral , a base de ibuprofeno e indicados para el alivio de la fiebre en niños a partir de los 3 meses de edad. En el caso de menores de 2 años consultar siempre al pediatra. Para niños a partir de 7 años o 20 kg y hasta los 12 años o 40 kg, existe la opción Nurofen Junior cápsulas blandas masticables. No administrar en caso de úlcera gastroduodenal. Lee el prospecto antes de usar estos medicamentos y consulta a tu farmacéutico.
En general tampoco se aconseja el uso alternado de paracetamol e ibuprofeno, en este caso siempre debe ser recomendado previamente por el pediatra.
¿Cuándo llevar al niño al pediatra por una fiebre?
En caso de que tu hijo tenga fiebre y menos de 2 años, debes siempre consultar con su pediatra. En el caso de que sean mayores, si la fiebre es muy alta y no consigues bajar su temperatura en casa tras 24 horas, también se aconseja llevarlo al pediatra.
Igualmente, debes vigilar la presencia de otros síntomas, como dolores fuertes de cabeza, rigidez en el cuello, si rechaza los alimentos o si presenta señales como irritabilidad, lesiones cutáneas o dificultad respiratoria.
Es aconsejable acudir a urgencias en caso de que el niño manifieste signos de empeoramiento o que alguno de los siguientes síntomas se presente:
- Dolor o malestar que no sean los normales de un resfriado o gripe, dolor de oído fuerte.
- Convulsión o pérdida de conocimiento.
- Rigidez de cuello.
- Dificultad para respirar.
- Vómitos y/o diarrea persistentes o muy abundantes que causen deshidratación.
- Si no orina o si la orina es escasa.
- Manchas de color rojo oscuro o moradas en la piel.
- Decaimiento, irritabilidad o llanto excesivo y difícil de calmar.
Si tu hijo sigue durante 2-3 días con fiebre es importante acudir al pediatra para que pueda determinar su causa e indicar el tratamiento oportuno. Recuerda que en caso de infecciones bacterianas solo un profesional médico puede prescribir el tratamiento antibiótico apropiado.
Nurofen pediátrico y Nurofen Junior son unos medicamentos de Reckitt Benckiser Healthcare, S.A.
Quizás te interese leer cuál es el mejor termómetro para tu hijo según la edad.
Si te ha gustado este artículo compártelo y sígueme en Facebook, Instagram, Twitter y suscríbete para a Papás e hijos!