El viernes 16 de marzo se publicó la lista de convocados de la Selección española de fútbol para disputar los amistosos contra Alemania y Argentina, justo antes de la cita mundialista de Rusia del próximo verano.
Personalmente, nunca he sido un gran admirador de Lopetegui, pero hay que admitir que hasta ahora las cosas le han ido bien. Sin embargo, la verdadera prueba de fuego llegará en Rusia, y creo que el seleccionador viene cometiendo unos errores en sus convocatorias que le pueden acabar costando caro .
En primer lugar tenemos el caso de la portería. Es obvio que David de Gea ha hecho méritos para ser el portero titular de la selección española, pero creo que ni Pepe Reina ni Kepa Arrizabalaga merecen este honor. El primero parecía ya retirado de “La Roja”, pero se ve que tenía que haber alguien que hiciese buenos chistes para que el vestuario se mantenga en pie. No voy a negar que sea el portero de uno de los mejores equipos de la Serie A italiana, pero creo que su defensa ha hecho más que él para lograr lo que el Napoli está logrando. El segundo, con todos los respetos a mis compatriotas vascos, creo que lo lleva precisamente por nacer en esta comunidad que es el País Vasco. Y es que, en mi opinión, que no vayan porteros como Sergio Rico (salvador del Sevilla FC en Europa), Adrián San Miguel (que aprovechó la lesión de Joe Hart para convertirse en titular del West Ham) o incluso el mismo Sergio Asenjo tras recuperarse de su dolorosa lesión, es prueba de que Lopetegui ha decidido llevar siempre los mismos tres porteros y olvidarse del resto de arqueros españoles de nivel.
Respecto a la defensa, no es tan grave. No obstante, Odriozola me merece la misma opinión que Kepa. Y no porque el chaval no lo esté haciendo bien, pues no a cualquiera lo quieren los grandes de europa, sino porque creo que hay jugadores más experimentados como Héctor Bellerín o Mario Gaspar que podrían aportar más a la defensa. En el tema de los centrales no me ha defraudado, pero creo que el entrenador español se acabará arrepintiendo de no haber intentado convencer a Lucas Hernández de defender los colores españoles, pues es sin duda alguna uno de los centrales con más proyección de futuro. Además, por cierto, otro de los que lo era y ya se ha asentado es Marc Bartra, pero parece que jugar en un equipo como el Real Betis no te hace merecedor de ir con la selección.
En el medio campo no habrá muchos cambios en lo que respecta al equipo titular, pero una selección merece también unos grandes suplentes, y no creo que Rodri tenga actualmente el nivel suficiente para cumplir esto. Por otro lado, lo de Parejo era muy merecido, pero quizás se lo haya llevado en uno de los momentos en los que menos estaba brillando. Aunque, repito, era merecido. Lopetegui, permítanme, confía mucho en Isco, pero más le vale al malagueño ponerse las pilas, ya que ha pasado de ser el jugador que tiraba de todo un Real Madrid CF a un suplente que cuando sale no da pie con bola, nunca mejor dicho.
Por último, tenemos a la delantera. Lucas Vázquez y Asensio se han ganado el derecho a defender a su país, habiéndose echado al Real Madrid a sus espaldas y ganándole la batalla a la “temible” BBC. Diego Costa nunca ha sido de mi agrado, pero supongo que no se puede dejar sin convocar al delantero titular del segundo equipo en la tabla de clasificación actual de La Liga Santander. Eso sí, más dudas me ofrecen Rodrigo Moreno e Iago Aspas. Ambos son jugadores con un gran talento, pero a mi parecer bastante irregulares. Irregularidad que este año no han tenido otros como Mariano Díaz, Pablo Sarabia, Gerard Moreno o incluso Cristian Portugués “Portu”, pero que siguen sin debutar con Julen Lopetegui.
A pesar de todo, confiaremos en el criterio del seleccionador nacional de cara a la próxima cita de Rusia, y esperemos que nuestros veteranos Ramos, Piqué, Busquets, Iniesta o Silva, entre otros, puedan darle a España una alegría como la que se vivió en aquel verano de 2010. Así que no queda más que animar y gritar ¡Vamos, España! soñando con otro “iniestazo”.