Que inventen los niños

Que inventen los niños,
Sabemos que los niños están especialmente dotados para la creatividad y la innovación, su pensamiento libre y desestructurado les permite ser muy eficaces para promover pensamientos e ideas fuera de la caja – “out of the box”- y para quebrar las fijaciones mentales, al menos hasta que acaban dañados en sus proceso educativo y de socialización. El pensamiento disruptivo de los niños es una verdadera bendición para la innovación. Y cada vez más las empresas y las instituciones lo saben y recurren a los niños para plantearles problemas complejos y obtener soluciones recurrentes. Los niños tienen las llaves del conocimiento de puertas cerradas para los adultos, ellos saben localizar ideas y opciones sencillas que pasan desapercibidas para los adultos con la cabeza repleta de ideas e información pero torpes para cruzarlas y aventurar nuevos territorios del conocimiento.
En este contexto vemos como cada día se prodigan las competiciones y concursos de ideas para que los niños aporten soluciones creativas a problemas crónicos y complejos que los adultos no sabemos resolver. Justamente tratamos de explotar su capacidad creativa y libre pensamiento para obtener nuevas ideas y visiones novedosas.
Un ejemplo de ello lo representa la experiencia “Inventa tu mundo”. La alianza de  ASHOKA y la Fundación LEMELSON  promueve el proyecto Inventa tu Mundo para inspirar y apoyar a una nueva generación de inventores que utilizan la tecnología para generar un cambio social positivo. Durante 10 años y en 14 países, han trabajado con jóvenes para poner en marcha más de dos mil emprendimientos sociales liderados por jóvenes.
Inventa tu Mundo persigue:
• Destacar el rol que las invenciones pueden tener en crear cambio social y;• Alentar a más jóvenes a generar cambio social a través de inventos.
¿Por qué inventos? Los desafíos más críticos de hoy, tales como el cambio climático y el desarrollo sustentable, son globales y complejos. Requieren de muchas soluciones creativas y audaces. Los inventos por sí solos no van a resolver nuestros problemas, pero sin ellos tampoco podremos atender nuestras necesidades más urgentes.
Con ese espíritu, Inventa tu Mundo busca apoyar a jóvenes inventores para crear un futuro mejor.
La Fundación Lemelson celebra y apoya a inventores y emprendedores a fin de fortalecer la vida social y económica. Fundada por Jerome Lemelson, uno de los inventores más prolíficos de los Estados Unidos, la Fundación Lemelson utiliza sus recursos para reconocer y celebrar a inventores exitosos, inspirar y acompañar a jóvenes, inventores y emprendedores en sus comunidades; diseminar tecnologías para mejorar la vida de las personas, generar oportunidades emprendedoras, e investigar y compartir información que destaque el valor de las invenciones en la sociedad.
Invent your worldFundación LemelsonJuan Fernández es el joven mexicano que ganó el concurso el año pasado. 



La pasión de Javier es ayudar a los más pobres, acabar con el hambre en el mundo. El año pasado ganó el prestigioso premio internacional Invent Your World Challenge (Desafío Inventa tu mundo), con sólo 15 años. La idea de su proyecto le empezó a rondar cuando tenía sólo nueve.Lo que sabe, lo ha aprendido en casa. Maria Teresa, su madre, es de origen mexicano. Peter, el padre, de Taiwan. Ambos se conocieron en la Universidad de Brown, y, convencidos de que la escuela sólo serviría para frenar el potencial de sus hijos, decidieron educarles en casa. Javier es el pequeño. Hay otro, Fabián, que está centrado en las finanzas. Peter dice que son un equipo complementario. Fabián es capaz de encontrar inversores para que Javier siga investigando.El invento ganador de Javier se llama Versatile (versátil). Utiliza 12 tecnologías diferentes que funcionan a la vez para tratar residuos, producir metano y biocombustible, generar alimentos para los humanos y para el ganado, captar gases del efecto invernadero y producir oxígeno. Y todo este sistema funciona a base de algas. Javier dice que podrían crearse máquinas de tamaño doméstico para usar en los hogares y máquinas grandes para alimentar a pueblos y ciudades. Según Javier, «las algas son la navaja suiza de la naturaleza. Se libra de muchas cosas que no queremos y produce muchas otras que necesitamos».Javier dice que debe gran parte de su éxito al inventor Ashok Gadgil. A los nueve años, asistió a una exposición sobre su trabajo y fue en ella donde aprendió que podía inventar y al mismo tiempo mejorar la vida de los demás.
(Infornación obtenida del último número de la revista Kindsein)