El Día de los Santos Inocentes es la conmemoración de un hecho hagiográfico (historiadelavidadelossantos)del cristianismo: la matanza de los niños menores de dos años nacidos en Belén (Judea), ordenada por el rey Herodes I el Grande con el fin de deshacerse del recién nacido Jesús de Nazaret.
No me pregunten cómo de este episodio trágico de la matanza de criaturas según narran las escrituras por orden del tarado mental de Herodes Agripa I, terminó siendo un día de bromas, generalmente todas de mal gusto que afortunadamente al pasar desapercibido por la televisión berreta, Tinelli no está al aire, y los demás siguen ocupados con Juan Darthés, y supongo que los hinchas de River terminarán sus interminables festejos por haberle ganado a Boca la Libertadores de este año, la final más soñada del mundo para ellos según Gallardo, cuyo karma comenzó un día de junio de 2004 cuando arañó al Pato Abondanzieri con sus pulidas uñas napoleónicas.Es así entonces que los únicos que ahora hacen bromas de mal gusto son algunos integrantes del gabinete nacional encabezados por el Ministro de HaciendaNicolás Dujovne.
Para que tengan una idea concreta de esto que les digo, me permito recordarles la broma del Día de los Inocentes del pasado 28 de diciembre de 2017, en Casa Rosada por parte del nombrado Nicolás y sus compañeritos de entonces: El Jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, el Ministro de Finanzas, Luis Caputo, y el titular del BCRA, Federico Sturzenegger, estos dos últimos barridos de sus respectivos cargos en el transcurso de este año.