Cuando arrancas un proyecto en la web, por ejemplo un blog, web, tienda o portal de anuncios, hay dos momentos que creo que son clave. El primero de ellos es claro,qué hosting web elegir, un servidor compartido o dedicado. Si el proyecto comienza y los requisitos no son muy elevados quizá un servidor compartido sea la propuesta más económica.
El problema llega cuando el tamaño del proyecto no deja de crecer y crecer. Con los años, por poner un ejemplo, Ubuntizando ha llegado a ocupar más de 20GB de espacio y servir miles de páginas al día y aunque puede no parecerlo comienza a ser un problema.
Muchos proveedores tienen límites en sus tarifas más económicas que pueden ahogar cualquier proyecto si no se mira con lupa todo lo que ofrecen. Y cuando comienzas a encadenar error 500 tras otro. Entonces es cuando surge la segunda gran pregunta. ¿Migrar o no migrar? ¿Qué problemas pueden existir? ¿El nuevo hosting tendrá buen soporte? ¿Sigo con el servidor compartido o invierto un poco más en un servidor dedicado? ¿Qué seguridad ofrece? Y si uso Joomla en vez de WordPress ¿El servicio técnico sabrá de lo que hablo?¿Hablará mi idioma?
Al final la mayor trampa para tu proyecto puede ser la costumbre. Quiero decir, mucha gente mantiene su contrato en el antiguo proveedor de hosting por miedo a su migración, ya sea por el tiempo de inactividad de la web o lo que pueden perder al cambiar a otro proveedor. Se acaba desarrollando como una especie de síndrome de Estocolmo pero aplicado a nuestra empresa de hosting. Es una decisión complicada, por suerte algunos proveedores lo ponen un poco más fácil.
Siteground es un proveedor de servicios de alojamiento fundada en 2004. Actualmente cuenta con 350.000 dominios registrados y granjas de servidores en los tres continentes. Tiene buenos precios, no son excesivamente caros y sus ofertas se ajustan a la mayoría de los clientes. Además acaban de abrir una oficina en Madrid por lo que ofrecen servicio de atención técnica en castellano.
Interesado por sus productos me puse en contacto con su centro de atención. Bastante rápido, desde que inicié el chat apenas trascurrieron 30 segundos hasta que pude hablar con un técnico y de la conversación pude extraer unas conclusiones.
El servicio técnico está formado por profesionales que destilan pasión por su trabajo. Quiero decir, nada de respuestas estandarizadas. El trato es muy cercano y sin ser todavía cliente han intentado resolver mis dudas.
Por ejemplo. Un sitio que trabaja con WordPress tiene el problema de que un plugin no actualizado o mal configurado puede hacer caer el rendimiento del sitio a cada momento. Las versiones modernas de WordPress se actualizan automáticamente. Pero esta función excluye a los plugins, así que cada actualización puede ser una ruleta rusa. Siteground resuelve esto añadiendo un servicio de actualización automática.
Durante el proceso de migración se encargan de todo mediante un seguimiento integral sin importar el tamaño de tu actual sitio web y garantizando que todo funciona en sus servidores antes del cambio. Además es un servicio de migración (web) gratuita.
Lo cierto es que me tienen casi convencido. Además su servicios de hosting y cloud están basados en Linux, como ya viene siendo habitual, y permiten adaptarse a las necesidades que tengamos.
Para colmo, para terminar de empujarme a decidir, tienen una oferta promocional donde regalan el un año de hosting gratis por contratar su servicio de alojamiento web. Lo cual resulta una oferta muy tentadora, más aún cuando la han activado por tiempo limitado y quedando menos de siete días para su finalización.
Por supuesto me dejo cosas en el tintero, hay mucho que explicar pero tampoco quiero asustar a aquellos que ahora mismo están tomando esta decisión. En mi caso apuesto por tomar las decisiones evaluando pros y contras, recomendaciones de conocidos y sobretodo el feedback que me ofrece poder tratar con el servicio técnico de primeras sin ser cliente. Migrar con la seguridad de que el SAT sabe de lo que habla me parece una solución muy válida, sin edulcorantes ni sorpresas. Es lo que ves, quiero decir. ¿Y tú? ¿Qué opinas?
Post patrocinado por Siteground, todas las opiniones son mías.