Que necesita mi hijo/a para ser feliz?

Es la pregunta interna que nos hacemos los padres cada vez que nos disponemos a hacer cualquier cosa para nuestros hijos. Tareas tan simples como poner una vaso de leche a su temepratura adecuada o decidir como decorar su cunpleaños están cargadas de ese pensamiento tan bonito pero a veces tan culpable de que erremos a la hora prepararles para el futuro.

Creemos sin duda que somos conocedores de todo lo que alimentará la felicidadd de estas criaturitas tan preciadas pero ¿estamos en lo correcto?

No siempre. La vida está hecha de aprendizaje y nuestros errores en este terreno también son parte de nuestro crecimiento como padres.

Aprendemos a cuidar a un bebe con toda la responsabilidad que esto implica; siendo tan delicado e indefenso. Luego le enseñamos como lidiar con el mundo y hasta que sea un adulto con su familia no dejará de aprender con nosotros. Esto es lo que realmente necesitan: que les enseñemos cosas, que les demos pautas y dirección en la vida, pasar tiempo con sus padres. No sólo tiempo de risas y regalos; tiempo de conversación y de estrechar lazos en cada etapa de su vida.

Un niño es capaz de ser feliz con un cromo que desee en el momento; explorar el jardin o una acampada en el salón de casa.Si tienes la oportunidad de darle mucho más adelante, cada uno se adecua a sus posibilidades pero no olvidemos lo principal: te necesita a ti.

• Necesita que te vuelvas loc@ a veces y hasta que pongas voces raras: no hay nada más gracioso que ver una faceta nueva.
• Necesita que le mires cuando te cuente algo, aunque te lo haya repetido 35 veces.
• Necesita algo de tiempo para adaptarse a cambios en casa en cualquier ambito y necesita que estés ahí para explicarle que ocurre en términos que el entienda.
• Necesita disfrutar de otros miembros de la familia: su cariño también es necesario para que entienda que son sus familiares.

Es increíble como los niños se fijan y admiran a sus padres de pequeños y no debe haber motivo que eso cambie con el paso de los años. Deben conocer que las personas tienen fallos y defectos; que el ser humano tiene derecho a vivir en un constante aprendizaje y eso será lo que siempre los mantendrá unidos.

 La cercania es felicidad, el entorno familiar y el tiempo de calidad rodeado de quienes amamos.

 Enseñale a amar y respetar a su familia y le estás llevando de la mano hacia la felicidad. Todo lo demás es felicidad pasajera.