San Torpes, mártir. 17 de mayo.
Según una leyenda tardía, sobre el siglo VII, Torpes fue funcionario del emperador Nerón, y se convirtió por la predicación del apóstol San Pablo (29 de junio, martirio; 30 de junio, conmemoración; 25 de enero, conversión; 18 de noviembre, dedicación de la basílica). Ciertamente San Pablo conocía a altos funcionarios del imperio, según su carta a los filipenses, donde dice "Todos los santos os saludan, especialmente los de la casa del César" (4, 22). Una vez converso, Torpes quedó confundido y se preguntaba "¿Qué debo hacer? Mientras continúe sirviendo a los ídolos, no podré recibir el bautismo y salvarme", y se dirigió al monte, donde vivía escondido un presbítero llamado Antonio, también discípulo de San Pablo. Subió a la montaña y llamó al anciano: "santo padre, Antonio, ¿dónde estás? Respóndeme". Cuando el presbítero salió de su cueva, Torpes le dijo: "Por favor, padre, escúchame y no temas. He conocido a Cristo y quiero ser bautizado". El presbítero le respondió: "¿Cómo sé si tus motivos son sinceros?" Torpes le replicó: "Si miento, que no sea digno de recibir el bautismo". Y el presbítero le bautizó con agua de un arroyo. A la par, le dio ánimos para enfrentar las consecuencias de su bautismo, Torpes le pidió oraciones y regresó a la ciudad dispuesto a afrontar la persecución.
Se enteró Satellicus, el prefecro de Roma, que Torpes era cristiano, por lo cual lo mandó arrestar y llevar a su presencia. Le conminó a dejar su nueva fe y adorar a los ídolos, pero como Torpes se negó, mandó fuera azotado con ramas, y luego colgado y quemados sus costados con antorchas. Luego mandó que fuera arrojado a los leones, pero estos lo respetaron. Finalmente, el santo fue decapitado y su cuerpo arrojado al mar. Su cuerpo, siempre según la leyenda, habría llegado flotando a la ciudad francesa de Frejus, donde se le guarda hasta hoy devoción.
Es abogado contra la falta de leche materna y de los niños que tardan en andar, tal vez por su nombre "torpes", o "tropez" en francés, que recuerda a otra palabra francesa: "estropiés", que significa lisiado o paralítico. Por ello comparte este patronato con San Eutropio de Saintes (30 de abril).
Fuentes:
-"France historique et monumentale". ABEL HUGO. 1837.
-"Dix mille saints: dictionnaire hagiographique". A. SIGIER. 1991.
A 17 de mayo además se celebra a
San Pascual Baylon, religioso franciscano.
Beato Bertoldo II, carmelita.