Que no, que no queremos que derriben el Cabanyal

Hoy han empezado los derribos en el barrio del Cabanyal. La alcaldesa de Valencia Rita Barberá se ha salido con la suya, vamos que esto lo ha hecho por sus ovarios, en vez de intentar arreglar un barrio, bastante olvidado desde hace años debido al impulso de nuevas zonas para la ciudad, prefieren eliminar parte del barrio y hacer nuevas viviendas. Al barrio del Carmen de Valencia la pasó algo parecido, estaba bastante  deteriorado y poco a poco con una plan de rehabilitación se ha ido mejorando.

Lo que se quiere hacer en el Cabanyal es la prolongación de la gran Avenida Blasco Ibañez para que llegue al mar. Esta prolongación se planeó sobre los años 80 cuando la ciudad de Valencia casi no tenía accesos directos a la playa, por lo tanto era algo lógico poder hacerlo. Pero ahora la ciudad tiene diferentes accesos, por lo tanto no hace falta hacer esta prolongación.

Desde hace unos años la plataforma Salvem el Cabanyal se ha puesto en pie de guerra contra todo aquel que quiere destruir parte de su barrio, un barrio muy característico de la ciudad de Valencia, debido a su proximidad con el mar y con la pesca. ¿Lo mejor para poder conservar parte de nuestra historia de la ciudad es hacer pisos de lujo?

Es cierto que la actual morfología de la ciudad de Valencia, se ha hecho con fuertes intervenciones en épocas pasadas. Por ejemplo la actual calle de la Paz se hizo destruyendo edificios que había para poder hacer una calle más amplia. O la actual Gran Vía de Madrid, muchas de esas grandes vías se hicieron para dar un “nuevo aire” a las ciudades. Pero no sé porque el caso de El Cabanyal tiene pinta más de un empeño personal de Rita Barberá que otra cosa. Mejor sería que se dedicara a mejorar ciertas carencias que tiene la ciudad y ese barrio que a destrozar parte de la historia de la ciudad. Mejor dejar El Cabanyal como esta y hacer una verdadera rehabilitación del barrio como tan bien funcionó en otros barrios de la ciudad.

Recomiendo mucho, muchísimo ver el reportaje “Cabanyal, herida abierta” del programa Crónicas, ayuda a entender mucho este gran problema.