Revista Coaching

Que nooo que las máquinas ni las carga el diablo ni se ponen en marcha solas… Puedes hacerlo campeón!

Por Miguel Pujante Marco @miguelthepooh
mar 8, 2015 2 comentarios gabriel garcia marquez

No pretendo hacer ningún homenaje a nadie en especial, solo que a veces sabéis que me entran los nervios por las cosas que pasan y sobre todo cuando descanso pataleo e intento que al menos una cosa cambie.

Hoy en pleno siglo XXI, mientras algunas cosas se denuncian públicamente estamos celebrando el día internacional de la mujer.

Ahora que se defienden los derechos de muchos ciudadanos, que las guerras sinsentido destrozan la historia de la humanidad, que se defienden las necesidades de todas las personas por igual, que personas individuales toman caminos complicados para ayudar a otros que ni conocen… ahora que cualquiera con un poco de ingenio y perseverancia puede construir un imperio…  Todavía conservamos un día especial para recordar que las mujeres son un igual.

¿dónde está la diferencia? en la sociedad las mujeres hacen como mínimo lo mismo que sus homólogos masculinos, en el trabajo son capaces de mantener un equilibrio complicado entre sentimientos y necesidades empresariales, en lo doméstico aportan un 30 – 40% extra del esfuerzo diario. Son organizadas, respetuosas (en general) y muy cuidadosas…

Evidentemente en el campo físico hay diferencias, algunas mujeres no tienen la capacidad física de algunos hombres… pero no nos engañemos, no todos los hombres tampoco.

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La sociedad sigue sin reconocer que las mujeres pueden gestionar cualquier entidad por grande que sea igual o mejor que los hombres, pero los estratos de poder impiden que avancen.

Incluso entidades como la fundación Clinton siguen dando un papel secundario a las mujeres, y encima pagándoles menos.

No es que considere que es injusto (que por supuesto lo es) si no que raya la ridiculez.

En la sociedad actual mientras algunos hombres calzan sus zapatillas en domingo las mujeres bregan con la casa y la alimentación de la familia y preparan la semana infernal para la unidad familiar. Todavía hay hombres que precisan que se les planchen las camisas o se les cuezan las lentejas mientras “calientan” los motores del partido del domingo, aun quedan ocho horas pero hay que estar preparados para enorme evento.

Si la economía lo permite y el hombre se siente generoso esas mujeres van a tener la “suerte” de no tener que cocinar y encontrarán un pollo asado en el mostrador de la cocina para que la hora de la comida sea más llevadera. Por supuesto al final encontrarán platos, bandejas y cubiertos por lavar o colocar en la máquina.

Cierto que no todas las personas somos capaces de hacer las mismas cosas, yo no soy capaz de hacer los cálculos necesarios para llevar una lanzadera espacial a destino, pero ¿lavar unos platos?

Creo que hay mujeres que no es que se merezcan quince días de vacaciones al año (eso si en apartamento para que no pierda el hilo de las tareas domésticas) o un día especial al año para recordar lo buenas que son. Es que merecen un templo digno de Zeus.

Claro que entonces podemos encontrar a los que digan y las tareas ¿quien las hace? Pues solo cabe una cosa… si eres tan “señorito” como para tener una esclava en casa al menos preocúpate de que reciba una retribución acorde con el trabajo que hace, que no le falte de nada y que sienta que cuando llegas  a casa después de las cañas del final de la jornada puede disfrutar de “su hombre”.

Si como en la mayoría de casas la “señora” tiene que invertir ocho horas en un trabajo infravalorado (de nuevo generalmente) al menos que no tenga que cargar con toda la tarea, que sienta que te has acordado de ella, que valoras el esfuerzo que hace, que colaboras en aquellas cosas que puedes hacer… Que nooo que las lavadoras u otras máquinas ni las carga el diablo ni se ponen en marcha solas… Puedes hacerlo campeón solo tienes que poner un poco de interés.

No voy a decir que te veas el “salvame” (si a ella le gusta) o la película “rosa” del domingo a la tarde ya que eso ni yo mismo soy capaz de hacerlo pero podrías cederle el televisor chulo para que ponga sus cansados pies en modo reposo y si eso cuando vayas a por una cerveza a la nevera al menos pregúntale si quiere o necesita algo. ¿es tan complicado?

Se me ocurren otras muchas cosas para que puedas celebrar cada día que estás siendo cuidado por una de las mejores personas del mundo… y si no estás de acuerdo te reto a que dejes un comentario en la entrada y gustosamente debatiré contigo, pero asegúrate de disponer de argumentos por que yo si los tengo.

Como despedida os dejo el video del 2002 en el que Xbox nos recordaba que la vida es corta.


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