Por Federico Landaeta
"La Masonería no ofrece nada a quienes osan tocar a sus puertas y logran ingresar, pero si le exige todo a quién entra en ella..." así dice una de las consejas más arraigadas que impera dentro de la Orden Masónica, no sólo aquí en Venezuela, sino, en la Masonería Universal.
Y aún cuando nada ofrece a los que buscan ingresar a ella, una vez cruzado el umbral, los masones encuentran mucho más de lo que pudieron haber pensado que conseguirían antes de franquear sus puertas y encontrase dentro del Templo. Realmente, lo que se consigue es una vida diferente, una vida total y absolutamente distinta a la que llevaba como un caballero profano, ya que después de haber pasado por la Iniciación Masónica, el hermano se ve obligado a cambiar totalmente su forma de ver y vivir la vida, pero esto es por conciencia, por necesidad propia, no por imposición externa.
Porque siendo él un Iniciado, es por consiguiente un "Hombre Libre y de Buenas Costumbres", y ya que, la Masonería es "El estudio de las Ciencias y la práctica de las Virtudes...", y habiéndose comprometido a cumplir fielmente los Principios Masónicos; el nuevo hermano tiene que cumplir con la practica constante de los más altos valores morales y éticos, y cumplir con los demás requisitos que harán de él un verdadero Masón. Tiene el deber de estudiarse a si mismo, y ha de practicar las virtudes, porque solamente con esa combinación le hará libre de las cadenas que le imponen los vicios y las pasiones al resto de la humanidad. Solamente así podrá ser reconocido como un digno Masón, y un Iniciado Real.
La Masonería, como escuela iniciática y medio de perfeccionamiento, no ofrece nada a nadie, pero aquel que llegue a poner en práctica sus nobles principios, verá, repentinamente, que se encuentra en un oasis ubicado en medio del caos de la vida actual, de las ambiciones personales, del egoísmo, de la violencia inclemente. Porque eso es lo que ofrece la Masonería a todo aquel que llegue a ella con un corazón abierto y en actitud receptiva: "...una grata y refrescante sombra en medio del sol abrazante de los deseos materiales y animales...
Por qué motivo la Masonería le exige todo a sus miembros..? Pues porque para poder alcanzar la meta mas elevada es imprescindible darlo todo, es inevitable que exista una entrega total. El precio que debemos de pagar por cualquier cosa que deseemos adquirir, tiene que ir de acuerdo al bien que estamos adquiriendo, y como lo que buscamos en la Masonería es el bien más elevado, el pago tendrá que ser el pago máximo.
Hay que hacer el mayor esfuerzo, y cuando mayor sea este, mayores han de ser los frutos que hemos de cosechar. Es nuestra acción la que determine la cuantía y el valor de los que hemos de recibir, aunque no estemos esperando nada a cambio, en la Masonería el hombre consigue lo que no consigue en ninguna otra parte: Elevarse por encima de las supersticiones, los vicios, el fanatismo y la ciega obediencia a los dogmas que tanto daño le han hecho a la Humanidad.
Escrito tomado del Libro "Breve Introducción a la Masonería" del Q.·.H.·. Federico Landaeta.
Tomado de: R.·.L.·. Luz del Caribe