¿Qué pasa con los 400 euros?

Los ciudadanos que cobran 400 euros son los que no tienen nada más. Los requisitos para tener acceso a esta ‘limosna’ así lo determinan. Pues bien, por un lado, dicen que por un problema técnico, no han pagado estos 400 euros de julio a los parados del plan PREPARA, y por otra parte todavía no se sabe si se prorrogará esta subvención, y eso que el quince de agosto termina su vigencia.

Total que estos peperos tan majos, por segunda vez –ya ocurrió en febrero—, retrasan el pago de lo único que tienen las familias excluidas, apartadas del mercado de trabajo. Sin embargo, para ellos es un simple retraso que pagarán un día de estos. ¿Qué importancia puede tener un retraso de diez o quince días para alguien que no tiene nada?

No sólo no tienen sensibilidad, además son capaces de dar justificaciones estúpidas. ¿Cómo puede ser un problema técnico, una transferencia mensual repetitiva, sin cambio de destinatario ni de cantidad? ¿Acaso ellos han tenido alguna vez un retraso al cobrar sus saneadas nóminas?

Hay que pensar lo que ha supuesto, para los receptores, este retraso, pero eso al PP le importa un bledo. Están por encima de esas cosas, nunca conocerán el paro. Y, por lo tanto, para ellos los parados son gente que no quiere trabajar y que por lo tanto no merece ninguna prestación.

Pero es que además, a cinco días del final de la norma que rige este subsidio, todavía no la han prorrogado, por lo que todos los que la reciben podrían quedar sin nada. En la más absoluta de las miserias.

Claro que la razón ya la da el vocero pepero Alonso: los que reciben los 400 euros son los parados de Zapatero. Total, que aquí hay dos tipos de parados, los que son de Zapatero y los que han sido producto de la crisis (porque ellos, los peperos, no producen paro, es un espejismo, ellos son nuestros ‘salvadores’). Y por lo tanto, aunque todos sean unos vagos redomados que no quieren trabajar, los de Zapatero además deberían ser severamente castigados.

Y es que, los parados se acomodan, son parados de Zapatero, pues “que se jodan”. Esa es la conclusión de esta gentuza. No sabemos si acabará esta prestación, a cinco días vista, pero de momento ya están enseñando la patita por debajo de la puerta al retrasar, sin ninguna causa justificada, el pago de esos 400 euros de la mensualidad de julio a 200.000 parados.

Les estorban, los parados les están ensuciando las estadísticas. Hay que hacerlos desaparecer. No se les va a dar 520 millones de euros (es el importe anual de la prestación) con lo que se está gastando en bancos. Además, si quieren dinero, que trabajen y se lo ganen, y si no: ¡Que se jodan!

Salud y República