¿Qué pasará con Van Persie?

Fuente: People.co.uk

Él es el hombre que condiciona las plantillas de media Inglaterra. El nombre que empujará la pieza de dominó que moverá el mercado. Robin Van Persie anunció hace escasas fechas que no renovaría su contrato con el Arsenal. Afición conmocionada, entrenador descolocado…el holandés quiere cambiar de aires. En el entorno gunner se da por hecho que su declaración implica un traspaso este mismo verano ante la posibilidad de que el club lo pierda sin beneficio alguno y posiblemente reforzando a algún gran rival. 
El Manchester United le quiere. Los red devils imaginan una delantera Rooney – Van Persie y sueñan con un poderío devastador. Si el holandés se marcha a Old Trafford, supondrá el traspaso más ruidoso que se recuerda en el fútbol inglés. ¿Puede ocurrir? Es posible, pero quizá no tan probable. Wenger jamás le ha vendido un jugador a Ferguson. Al parecer, podría ser el deseo del futbolista el acabar en Manchester. De momento, el United ha hecho una oferta, pero el Arsenal prefiere negociar con otros. Se habla de 220.000 libras semanales para el delantero, sin publicarse aún un hipotético precio de venta. La experiencia en la Premier League aporta prudencia ante los insistentes rumores de traspaso. Esto no es Italia, donde los jugadores hasta hace poco se comerciaban como cromos en la plaza del pueblo. Si RVP acabara en Old Trafford, el hiriente caso Figo tendría su continuación en Londres. Sin juzgar justicia o conveniencia de intereses, el terremoto sería el mayor posible. 
En la lista de preferencias del Arsenal está la Juventus (implicada también con Llorente), una complicada sorpresa ibérica y el segundo actor inglés de la película, el Manchester City. Los citizens no han roto el mercado como suelen hacer los últimos veranos; ni siquiera lo han catado mínimamente. La presencia actual de Agüero, Balotelli, Dzeko, Tévez e incluso Adebayor (en negociaciones para fichar por el Tottenham) impide imaginar a Van Persie de celeste. Sin embargo, la habitual locura transitoria veraniega del City no permite descartar esta opción. Parece un hábitat menos forzado para el holandés que los vecinos de Trafford. Un equipo más impersonal, una llegada con menos rencor y dolor para todos, igualmente un campeón de la Premier League. Y aunque se define como un movimiento más natural, no parece que la tendencia sea esa. Al menos, no tan visible como la del United. 
Así estamos, en un inquieto compás de espera para comprobar donde jugará a partir de esta temporada uno de los jugadores más importantes de la competición. En pocos días, tendremos la respuesta. Y sea cual sea, se escribirá mucho. La diferencia estará en qué barrio llorará y qué ciudad sonreirá más.

Fuente: Telegraph.co.uk

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