En el Comité Técnico de Árbitros están molestos con todo lo que se está hablando sobre las expulsiones de los entrenadores de Primera División. En las primeras diez jornadas, los colegiados mostraron la roja a ocho entrenadores, uno más que en toda la campaña anterior.
“Nunca ha estado autorizado que un entrenador protestara”, asegura un miembro relevante del propio Comité. No tienen permiso para hablar, ni si quiera para defender a su colectivo. Sin embargo, permite que le demos voz, pero que no lo nombremos para no meterse en problemas.
“El árbitro es el que tiene que mandar, no se puede autorizar a los jugadores ni a los entrenadores para que protesten, deben tener un comportamiento irreprochable con el árbitro”, asegura que un tono de enfado preocupante.
Nadie se explica qué ha podido pasar para que de un año a otro los árbitros hayan cambiado su manera de interpretar la normativa.“El problema es que se trata de una herencia del pasado, al árbitro se le ningunea, y eso no puede ser”, reclama.
“Hemos ido permitiendo cosas que han ido creando norma. Es normal que el entrenador proteste, pero no está permitido.Es una costumbre heredada con el paso de los tiempos, pero no se puede protestar, lo dice el reglamento”, continúa. “Es una cuestión reglamentaria”, insisten desde el Comité Técnico de Árbitros.
“El problema es que estaba mal hecho antes, no que ahora haya un problema con la norma, ahora se está aplicando bien”, insiste. “La norma está escrita y es una norma internacional, no pasa sólo en España. Es la regla número 5 de la guía universal y no se refiere sólo a los entrenadores, se refiere a todos los oficiales”, recuerda.
No parece fácil el matrimonio y la convivencia entre árbitros y entrenadores. ¿Dónde está el límite?“Hay entrenadores que entran en el terreno de juego, ya no es sólo que se salgan de su área técnica. ¿Cómo se para eso? ¿Permitimos al entrenador la protesta? ¿Permitimos que el entrenador intimide al árbitro? ¿Permitimos que el entrenador busque la animadversión del público? No se puede, hay que cortar con eso”, insisten.
Algunas voces aseguran que existe una directriz para que los árbitros mantengan a raya a los entrenadores, pero este extremo lo niegan desde el Comité Técnico de Árbitros.“No hay ninguna directriz como se dice, hay una circular de principio de pretemporada, y en ella se habla en defensa del trabajo del entrenador, es justo todo lo contrario de lo que están diciendo”, se defienden.
Los árbitros mantienen reuniones antes y durante la temporada, pero en las previsiones del Comité Técnico de Árbitros no está pensado tratar el tema porque consideran que no hay ningún problema y que las cosas se están haciendo bien. “El tema no ha sido tratado ni va a ser tratado en las próximas reuniones del Comité Técnico de Árbitros. Se mandó una circular en agosto a todos los árbitros y a los clubes, y en ella no se hablaba sólo de esta norma. No se va a tratar porque no hay ningún problema ni nada que merezca ser tratado”, reconocen.
Los árbitros reciben críticas de los entrenadores, presidentes, futbolistas, periodistas… incluso de su excompañeros. “Por culpa de muchos ex árbitros que ahora critican desde los medios de comunicación, está la cosa como está”, protesta.
“¿Los árbitros expulsan caprichosamente? Si fuera así les dirían algo incluso desde los organismos internacionales. No pueden expulsar a nadie por una causa injustificada”, protestan.
Los entrenadores piden la mediación e interpretación del cuarto árbitro, y se quejan de que no favorezca la comunicación y normalización entre los banquillos y el colegiado. “Al cuarto árbitro no se le paga para que sea un mediador entre los banquillos y el árbitro, es un sustituto del árbitro principal por si tiene algún problema”, reivindica.
Quizá una solución sería que el mundo del fútbol les defendiera públicamente. “Que en sala de prensa hagan lo que quieran, la regla se refiera al terreno de juego, no a lo que digan en la prensa”, asegura con desdén.
“Lo que hay que preguntarse es si dejamos que se incumpla la norma o aplicamos la norma. No podemos decir que es excesivo, que se han expulsado a muchos entrenadores. Tenemos que ver si el comportamiento de los entrenadores es acorde o no con la norma. Los entrenadores pueden dirigir, no protestar”, continúa.
“Es un problema de formas, si no se mantiene una actitud correcta, debe ser expulsado. Y si no están de acuerdo, que recurran. ¿Se creen que no revisamos todas las tarjetas y expulsiones?”, se pregunta.
“Da la sensación de que es un tema de los árbitros españoles y no es así, es una guía universal”, vuelve a recalcar. Lo ideal sería poder ponerle nombre a la voz del Comité Técnico de Árbitros que intenta defender a quienes fueron sus compañeros, pero insisten en no hablar habitualmente. “Nunca sirvió para nada hablar. El problema es de creer o no en el arbitraje. Quien cree en el arbitraje no necesita que nadie se lo explique, y quien no cree en el arbitraje no se lo va a creer nunca”, se lamenta.
“¿Se imagina que un abogado, o un acusado le dijera al juez o al fiscal, ‘no tiene ni idea’, ‘váyase de una vez’ o le insultara? No tendría sentido. La autoridad en un partido es el árbitro, y hay que respetarla igual que a un juez en un juicio”. Amén.
8 EXPULSADOS EN 10 JORNADAS
Llevamos diez jornadas de liga, y ocho entrenadores ya han enfilado el túnel de vestuarios antes de que acabara el partido. En toda la temporada pasada fueron expulsados ocho entrenadores, uno menos que en los dos meses y medio que llevamos de campeonato. Las expulsiones se están sucediendo, al parecer los árbitros siguen una nueva directriz por la que no toleran nada a los entrenadores en la banda. Todas las expulsiones directas conllevan esta temporada dos partidos de suspensión y 600 euros de multa.
Los casos de Paco Herrera y Paco Jémez son diferentes. Los dos fueron expulsados por doble amonestación y sólo fueron sancionados con un partido. Si bien, el Comité de Competición sancionó con un partido más al entrenador del Rayo Vallecano, porque tras ser expulsado se quedó viendo el partido en el túnel de vestuarios.
Jornada 2. Osasuna-Barcelona. Árbitro Muñiz Fernández. Expulsado el entrenador del Barcelona, Tito Vilanova, “por protestar airadamente un lance del juego habiendo sido advertido con anterioridad por el árbitro asistente”.
Jornada 4. Espanyol-Athletic. Árbitro Pérez Montero. Expulsado el entrenador del Espanyol, Mauricio Pochettino, fue expulsado “por dirigirse a mi cuarto árbitro en señal de disconformidad con una de mis decisiones, con los brazos en alto y diciéndole a viva voz: “esto es una puta vergüenza”; repitiéndolo en varias ocasiones”. También expulsó a su ayudante, Toni Jiménez, “por dirigirse a mi cuarto árbitro una vez finalizado el partido dentro del terreno de juego, protestando insistentemente de forma airada, nuestra labor. Al finalizar el partido y en las inmediaciones de nuestro vestuario, salió a nuestro encuentro el entrenador del Espanyol pidiendo explicaciones por su expulsión. Todo ello gritando y diciendo: “a ver qué vas a poner en el acta”, intentando acceder a nuestro vestuario, sin conseguirlo”.
Jornada 5. Celta-Getafe. Árbitro Teixeira Vitienes. Expulsado el entrenador del Celta, Paco Herrera, por doble amonestación. La primera por “formular observaciones a las decisiones del línea”, y la segunda por “formular observaciones a una de mis decisiones”.
Jornada 5. Atlético-Valladolid. Árbitro Muñiz Fernández. Expulsado el entrenador del Valladolid, Miroslav Djukic, por “protestar airadamente levantando los brazos, una decisión mía, habiendo sido previamente advertido por el cuarto árbitro”.
Jornada 6. Sevilla-Barcelona. Árbitro Mateu Lahoz. Expulsado el entrenador del Sevilla, Míchel, por “dirigirse al equipo arbitral, de viva voz y gesticulando con los brazos en alto y fuera de su área técnica, en los siguientes términos (en repetidas ocasiones): ‘No tenéis vergüenza’”
Jornada 8. Granada-Zaragoza. Árbitro Teixeira Vitienes. Expulsado el entrenador del Zaragoza, Manolo Jiménez, por “protestar de forma ostensible una decisión del asistente”.
Jornada 9. Rayo-Barcelona. Árbitro Pérez Lasa. Expulsado el entrenador del Rayo, Paco Jémez, por doble amonestación. La primera, según el acta arbitral, por “dirigirse a mí con los brazos en alto y de forma reiterada, recriminándome una de mis decisiones”. La segunda amonestación ,y consiguiente expulsión “por salir del área técnica y con voz en grito y de forma insistente recriminándole la decisión anteriormente citada”.
Jornada 10. Valencia-Atlético de Madrid. Árbitro Teixeira Vitienes. Expulsado el entrenador del Valencia, Mauricio Pellegrino, expulsado “por lanzar un botellín de agua deforma violenta contra el suelo, para acto seguido salirde su área técnica y dirigirse al cuatro árbitro protestándole de forma ostensible”.
Habría que añadir las expulsiones de los ayudantes de Pochettino, Toni, y de la Real Sociedad, Michel Troin, que también han visto la roja esta temporada.
LOS ENTRENADORES PROTESTAN
Los partidos tienen su prolongación en sala de prensa, donde los preparadores se despachan contra las decisiones de los colegiados.
Miroslav Djukic, entrenador del Valladolid, cargó contra su expulsión con dureza. “No sé por qué me han expulsado. Estoy deseando ver el acta. Seguro que me van a sancionar y no sé por qué. Sólo estaba hablando con el cuarto árbitro. Transmitiéndole educadamente mis quejas, pero parece que no se puede ni hablar. Parece que algunos no se han dado cuenta de que Franco ha muerto”, declaró en rueda de prensa.
También se mostró implacable el entrenador del Rayo Vallecano, Paco Jémez. “Ni yo sé por qué me ha expulsado. Ha habido un problema de comunicación. A mí me dice el cuarto árbitro que estoy amonestado y Pérez Lasa llega y me dice que estoy expulsado. Y en el acta dice doble amonestación. Hay que ponerle coto a esto, no se puede echar a una persona, un entrenador, por no hacer nada. Esto hay que pararlo, parece una dictadura, no puedes hacer nada, ni una referencia al juego con total respeto. No se puede expulsar a alguien por no hacer absolutamente nada. Es algo que se deben de replantear”, insistió un Paco Jémez.
Mauricio Pochettino, el entrenador del Espanyol, también enfiló el túnel de vestuarios antes de tiempo. “Estoy enfadado, sigo enfadado porque creo que ha sido una injusticia. El acta no refleja lo que yo pienso que sucedió, primero porque soy muy respetuoso con los árbitros porque entiendo que no es una labor fácil. Creo que no he dicho lo que sale, estamos muy enfadados por la injusticia. Echarme de esa forma no creo que haya sido la mejor solución. Son casi cuatro años los que llevo entrenando y nunca había tenido un problema, por eso me llama mucha la atención estas cosas. A veces el estrés es grande y uno comete imprudencias pero esperamos que sea lo mínimo”, manifestó en rueda de prensa.
El último expulsado ha sido Muricio Pellegrino, entrenador del Valencia. “Me expulsaron por tirar la botella al suelo. Les pido que entiendad que nosotros somos personas y que niestro trabajo es tan importante como el de ellos. Todos tenemos errores en la vida y es algo a valorar entre todos”, quiso zanjar.
Otro técnico que no estaba de acuerdo con lo que rezaba el acta arbitral es Míchel, el entrenador del Sevilla. “Le he dicho que había mano, pero no lo he insultado, creo. Él ha redactado que le he llamado sinvergüenza, creo que no he sido yo”. En la misma tesitura se mostró Manolo Jiménez, entrenador del Zaragoza. “La roja fue muy injusta porque por levantar los brazos y decir ‘no’, no merece ser expulsado un profesional”, declaró.
Tito Vilanova fue el primero en ser expulsado esta temporada, y en sala de prensa repasó lo sucedido en el campo. ”Le he dicho al linier que era falta, que era clarísima. ‘No protestes’, me ha dicho. ’No protesto, solo digo que es falta’, le he dicho al cuarto árbitro. Y entonces me ha expulsado. Ahora todos sabemos cual es el baremo de este árbitro, todos los equipos de primera estamos avisados. Al árbitro no le he protestado. Solo le he comentado al linier si eso no era falta. Creo que es excesivo. No le he dicho nada fuera de tono”, reiteró sobre su expulsión. Algo más calmado se mostró Paco Herrera, entrenador del Celta. “Sólo le dije al colegiado que estuviera tranquilo, que no pasaba nada. Pido disculpas a mis jugadores y al árbitro, aunque no he hecho nada”, declaró educadamente.
TEIXEIRA Y MUÑIZ ‘LOS EXPULSADORES’
Si José Antonio Teixeira Vitienes es el encargado de dirigir el partido, los entrenadores de uno y otro equipo ya se pueden echar a temblar. En tan sólo diez jornadas, ha expulsado a tres. Manolo Jiménez, Paco Herrera y Mauricio Pellegrino ya han sufrido en sus propias carnes cómo se las gasta Teixeira.
Paco Herrera fue expulsado por doble amonestación, en el minuto 22 y en el 89. Las dos tarjetas amarillas fueron por protestar decisiones arbitrales en el transcurso del juego. La primera al línea que trabaja en la zona técnica del Celta, y la segunda al propio Teixeira.
Los casos de Manolo Jiménez y Mauricio Pellegrino fueron diferentes. Roja directa. El entrenador del Zaragoza protestó “airadamente” y se fue a la calle. Elcastigo fue doble, puesto que la sanción le impidió sentarse en el baquillo, por segunda temporada consecutiva, ante ‘su’ Sevilla.
En Mestalla, Pellegrino se calentó en la primera mitad, tiró una botella al suelo, lo vio Teixeira y lo expulsó. Tercer entrenador que manda a vestuarios por protestar, de una u otra manera, decisiones arbitrales.Teixeira se fue abucheado de Valencia al final del partido, a pesar que el equipo local se impuso al Atlético por 2 goles a 0.
A Teixeira Vitienes le sigue muy de cerca en esta dudosa clasificación Muñiz Fernández. El árbitro más engominado de Primera División, ya se ha ‘cargado’ a Tito Vilanova y a Djukic. El entrenador del Barcelona fue expulsado en el Reyno de Navarra en la segunda jornada de Liga, el primer técnico expulsado de la temporada. Tito le hizo una apreciación sobre una decisión suya, y tuvo que acabar de ver el partido en la televisión que hay dentro del túnel de vestuarios.
Tito criticó a Muñiz, igual que hizo Djukic. También por protestar fue expulsado directamente, y en sala de prensa llegó a decir que “parece que algunos no se han enterado que Franco ha muerto”.
COMITÉ DE ENTRENADORES Y COMITÉ DE ÁRBITROS
Los entrenadores y los árbitros están más lejos que nunca. Ocho expulsados en diez jornadas son muchos expulsados. No es de extrañar que Eduardo Caturla, presidente del Comité de Entrenadores, se haya reunido con Sánchez Arminio, presidente del Comité Técnico de Árbitros.
Sánchez Arminio reconoce que ”a los árbitros les molestan mucho las protestas y gesticulaciones y han hecho hincapié en dos casos: el levantarse masivamente del banquillo y los gestos al cuarto árbitro. Entienden que se les echa el público encima”.
Por su parte, Caturla muestra la “inquietud” que hay en el estamento.“Habría que analizar cada caso, pero en algunos choca. Confío en que esto sea pasajero y que todo vuelva a la normalidad”, declaró. “Estamos a muchas pulsaciones y a veces no se pueden controlar los gestos”, recuerda.
“El problema es que salvo el acta no tenemos acceso a lo que pasó. Todos los clubes han recibido circulares este verano. A los árbitros les molesta mucho las protestas y gesticulaciones. Sobre todo las masivas, cuando se levanta todo el banquillo porque entienden que se les echa el público encima”, insiste Sánchez Arminio que sale en defensa del colectivo arbitral.
El Comité de Competición interpreta las actas de los colegiados y aplica el artículo 120 del código disciplinario. Por ello sanciona a todos los entrenadores expulsados con dos encuentros y 600 euros de multa. Es el castigo más leve que contempla el artículo 120, que estima sanciones que oscilan entre los dos partidos y un mes de sanción.