¿Qué se come en Austria? Primera parte.

Llevo no sé cuántos años por aquí y nunca me ha dado por escribir una entrada tan concreta - y espero que útil - como esta. ¿Qué se come en Austria? ¿Cuáles son los platos típicos que podemos encontrarnos por aquí? Y sobre todo, ¿qué significa cada uno de ellos sin tener que recurrir al traductor o a las imágenes del buscador cuando estoy en un restaurante? Pues allá vamos...

El plato estrella de la cocina austriaca, a pesar de que su origen sea italiano, es el Wiener Schnitzel, que no es más que un filete empanado con patatas, ya sean éstas fritas y con ketchup o cocidas y luego un poquitín fritas con perejil. En cualquiera de los casos, es común que nos sirvan este plato con un cuenquito pequeñín de Preiselbeeren (= arándanos rojos) y una rodajita de limón, todo lo cual, en teoría, se mezcla con o se le echa a la carne.

Ahora va un secreto de cocinero: no es lo mismo un Wiener Schnitzel que un Schnitzel Wiener Art. Si en la carta pone lo primero sin añadir nada más, significa que la carne es de ternera. Si ponen lo segundo o al Wiener Schnitzel añaden a continuación el tipo de carne, es que se puede tratar de cerdo, pavo, etc.

La versión extendida de este plato es el Cordon Bleu, o libritos, que los llama mi madre, y que es lo mismo que lo anterior con la diferencia de que el filete reduce su tamaño a la vez que aumenta su anchura para rellenar su interior de jamón y queso.

Un plato muy típico por aquí es el Gulasch, en este caso originario de Hungría, que no es otra cosa que una carne con salsa con un sabor muy intenso. Según quien lo cocine, puede resultar incluso un poco picante. Hay algo bastante similar: el Ragout, siendo la única diferencia con el Gulasch el orden en que se cocinan los ingredientes y el que un par de cosas se le echan a uno de ellos pero no al otro. ¿Y qué tipo de carne es ésta? Pues cualquiera... Yo lo he visto incluso de ciervo...

Esta carne en salsa suele servirse con uno o varios acompañamientos, como pueden ser por ejemplo:

1. Spätzle. También disponibles como plato único vegetariano bajo el nombre de Käsespätzle. Se trata de una especie de pasta, aunque en realidad no lo es, hecha a base de harina, agua y sal, y sin sabor alguno a menos que se acompañe de una salsa, queso (Käsespätzle) o de aquello a lo que sirva de añadido.

2. Semmelknödel. Se trata de unas bolas de tamaño considerable que llevan pan rallado, leche, sal, pimienta y algo verde (tipo perejil, o algo similar que se tenga a mano). Así, sin nada más, se hacen bastante pesadas porque están algo secas, pero al mezclarlas con la salsa de la carne se reblandecen y están muy ricas.

3. Rotkraut = repollo morado.
En cualquiera de los casos, estos acompañamientos cumplen una única función: saciar. Recordemos que los austriacos, a diferencia de los españoles, no suelen comer con pan.

Siguiendo con la carne, otro de los básicos en cualquier carta de restaurante es el Schweinsbraten, que se puede traducir como asado o pierna de cerdo y que lleva acompañamientos similares a los del Gulasch, a veces incluso varios al mismo tiempo.

Zwiebelrostbraten es un trozo de filete de ternera cubierto por una capa de cebolla cortada muy finita y frita y que suele impedir ver el filete que hay debajo. No tengáis miedo, cortad y mezclad. Incluso aunque no os entusiasme la cebolla, el sabor merece la pena hacer la prueba. Lo normal es que este plato lleve también Spätzle, Kroketten (no confundir con nuestras croquetas, las de aquí son una masa de patata) y Speckbohnen, es decir, un manojo de judías verdes muy largas enrolladas en una o dos lonchas de bacon, todo ello frito, por supuesto.

Y aquí lo dejaremos por ahora, que no sé a vosotros, pero a mí me da hambre pensar en tanta comida. Próximamente, ¡la segunda parte!