Últimamente se oye mucho la palabra ftalatos como componente de productos de uso diario que deberían no contar con ellos en su composición. Pero … ¿qué son?.
Son líquidos incoloros e inodoros producidos por reacción del anhídrido ftálico con un alcohol apropiado (normalmente alcoholes de entre 6 y 13 carbonos). pueden estar en muchos productos de uso diario: pegamentos y adhesivos, aparatos electrónicos, materiales de construcción, productos de limpieza, productos de aseo personal (geles, champús, jabones, lociones, cosméticos…), perfumes, envases (tales como botellas de agua), pinturas, barnices, juguetes, arcilla para modelar, ceras, tintas de impresión, ropas y tejidos, ambientadores, pesticidas… Y diferentes investigaciones muestran como estas sustancias se miden abundantemente en el polvo doméstico. O como pasan al torrente circulatorio sea por inhalarlos u otras vías, como por ejemplo cuando se aplican sobre la piel determinados productos que los contienen.
Se sospecha que pueden potenciar la toxicidad de otros compuestos químicos, desembocando en problemas de fertilidad.
No sólo se agregan niveles de ftalatos mayores a los permitidos para fabricar juguetes de niños, sino que además adicionan una mayor cantidad de estabilizadores de zinc,
plomo, estaño, bario o cadmio (metales pesados y tóxicos). No conformes con aumentar la dosis de ftalatos en el afán de lograr mas utilidades agregan a su fórmula materiales tóxicos tales como keroseno, aguarrás, biodiesel, diesel, aceite automotriz, creando así un cóctel letal para la salud humana.Los juguetes de niños contienen de entre 20% a 50% de ftalatos del peso total del producto, y esas proporciones fueron suficientes para que muchos países hayan prohibido la fabricación y comercialización por considerarse un riesgo para la salud.
Los juguetes infantiles hechos con ftalatos contaminan el cuerpo humano de forma gradual, poco a poco según el tiempo que el individuo esté expuesto a este material día tras día, es por ello que se recomienda que al seleccionar éste tipo de productos, se adquieran productos fabricados con materiales alternativos tales como Silicona Pura y SiliconFlesh (Carne de Silicona).
Si un niño usa un juguete con contenido de ftalatos, no va a sentir en ese momento daño alguno, ni ninguna sensación extraña, simplemente va a administrarse microdosis de ftalatos que van a ir directamente a la sangre al ser absorbidos por las mucosas. En cada uso de dicho juguete, se administrará una dosis que aumentará de forma periódica los niveles de ftalatos en la sangre. Esto significa que a mayor uso mayor contaminación. Si bien no ha sido posible crear un diseño experimental en un grupo control que esté expuesto a los niveles de ftalatos que contienen los juguetes infantiles, en un uso constante, algunos estudios en animales han descrito efectos de la tiroides, los ovarios, los riñones y la sangre.
Se han estudiado alteraciones producidas por exposición prenatal, en la infancia, en adultos… Entre los efectos asociados se citan: aumenta el riesgo de eccema en la niñez, asma y alergia infantil, limitación de la función pulmonar en hombres adultos, daños en el esperma, anomalías en el desarrollo genital masculino (como la criptorquidia), alteración de los niveles de testosterona, ginecomastia en adolescentes varones, acortamiento de la distancia anogenital en varones recién nacidos (síntoma de feminización), alteraciones del comportamiento (como feminización de la conducta infantil), telarquía precoz (desarrollo prematuro de las mamas en las niñas), endometriosis, cáncer de mama, alteración de la formación de los folículos ováricos, partos prematuros, bajo peso al nacer (que puede traer aparejado mayor mortalidad infantil y mayor riesgo de problemas cardiovasculares y metabólicos en el estado adulto ), trastorno de déficit de atención e hiperactividad, problemas de desarrollo cognitivo y motor en los niños, obesidad, resistencia a la insulina (ligada a la diabetes)…, etc.Estudios realizados en animales relacionan los ftalatos con los defectos de nacimiento, trastornos hormonales y cáncer. Algunos de los efectos perjudiciales para la salud de los ftalatos son: pubertad precoz en las niñas, partos prematuros, infertilidad masculina y defectos de genitales.
Los niños son los están en el mayor riesgo. Los ftalatos ponen en riesgo la salud y seguridad de los niños en crecimiento. Cuando los niños pasan por las etapas críticas de desarrollo, son vulnerables en particular a los químicos del medio ambiente. Sus organismos en desarrollo no pueden protegerlos de los ftalatos y de otros químicos tóxicos.
Los ftalatos pueden atravesar la placenta en la mujer embarazada y por lo tanto es posible que haya exposición antes del nacimiento. Es por eso que las mujeres que utilizan masajeadores íntimos o vibradores durante el embarazo, deben tener especial cuidado en que estén libres de ftlatos y si es posible, fabricados con silicona ápta para contacto con la piel. Hay marcas de alta calidad como que están libres de ftlatos.Los bebés pueden estar expuestos cuando se les da el pecho y los ftalatos también pueden introducirse en el cuerpo cuando los niños tocan con la boca, chupan o mastican juguetes u otros objetos que contienen ftalatos. Un estudio reciente de pediatría descubrió que los niveles de ftalatos en la orina habían aumentado en los bebés, especialmente los menores de 8 meses, expuestos a lociones, polvos y champús para bebés, etc.
¿Cómo evitarlos?
- Tenga cuidado con los plásticos en la cocina.
- Algunos plásticos que se usan para guardar alimentos y cocinar pueden pasar ftalatos a la comida. Siempre que sea posible, use alternativas diferentes al plástico, tales como vidrio, cerámica (sin plomo) y acero inoxidable
- Use vidrio o cerámica para calentar alimentos y bebidas en el microondas.
- Envuelva los alimentos en papel de estraza, papel de cera o toallas de papel.
- Evite los juguetes y productos de plástico. Sepa que los productos de plástico como juguetes ‘apretables’, sonajeros, aros de dentición, tetinas (chupetes), tacitas para bebés y biberones pueden contener ftalatos. Asegúrese bien leyendo las etiquetas del fabricante y rehúya de las etiquetas que no son claras.
- Use juguetes y libros de madera natural, papel, tela o metal.
- Busque productos que indiquen que “no contiene ftalatos” o “no contiene bisfenol A (BPA, por sus siglas en inglés): evite el uso de plásticos que no tienen identificación en el paquete.
- Evite el uso de lociones, polvos, champús para bebés que no tengan todos sus ingredientes muy claros.
La UE prohibió su uso en cosas como chupetes, tetinas y mordedores infantiles,
pero no se han adoptado medidas restrictivas debidas para otros muchos usos, dándose la circunstancia de que sea precisamente en dependencias del hogar tales como el cuarto de los niños, donde más presencia pueda darse de estas sustancias (al igual que, fuera de casa, en sitios como las guarderías, por cosas como suelos, paredes empapeladas de vinilo, juguetes, colchonetas, manteles de plástico… que pueden contenerlos).Es mejor apartarlos del uso diario, el echo de que nuestro crema corporal, champú… los contenga, no significa que por ello vayamos a tener cáncer ya que las cantidades para que estos ingredientes nos causen daño han de ser superiores a los límites de toxicidad o por lo menos, muy altos, por lo que es más fácil que se produzcan en la industria química que por la utilización de un champú. Pero … cuantos menos usemos mejor.
Parte de: http://www.hogarsintoxicos.org/, http://www.lineaysalud.com/, http://geohabitar-ltda.blogspot.com.es/2012/07/ftalatos-que-pasa-con-la-exposicion.html, wikipedia, .