Lo advierto, este es un post de lo más subjetivo. Noruega me encanta y Oslo, a pesar de no ser la ciudad más bonita que he conocido, tiene algo especial. Me atrae y hace que me plantee una y otra vez volver, a pesar de que me faltan miles -millones- de lugares por descubrir. Aunque lo mío con Oslo es algo totalmente irracional voy a intentar explicar qué es lo que me ha enamorado de este lugar y de paso inspiraros una visita en su año: el “Año Munch”.
1. La armonía entre ciudad y naturaleza, entre paisaje y arquitectura, entre lo moderno y lo antiguo. Oslo es un conjunto de contrastes donde nada desentona y cada cosa parece ocupar su lugar. Por eso las casas de madera de las islas del fiordo combinan perfectamente con el puerto al fondo.
2. La calle peatonal Karl Johans gate parte de la Estación Central y nos lleva a través de tiendas, bares, plazas y edificios representativos hasta el Palacio Real. Conviene recorrerla despacio y no perderse el Parlamento (Storting), la Catedral, los edificios de la Universidad, el Teatro Nacional, y un largo etcétera que incluyen una pista de patinaje al aire libre en invierno.
El Palacio Real
3. El fiordo de Oslo -con sus islotes, sus cabañas de colores, los barcos y el perfil de la ciudad al fondo con el ayuntamiento, la fortaleza Akershus y el puerto- es inolvidable. Embarcarse en un crucero por el fiordo equivale a soñar con quedarse en este lugar para siempre.
Las islas del fiordo
4. La península de los museos. A Bygdøy se puede llegar en autobús o con el barco 91 que parte del ayuntamiento, una buena forma para conocer el fiordo. Aquí se encuentran algunos de los museos más curiosos de Oslo como el museo Vikingo, el del barco Fram, el Kon Tiki, el museo del folclore… Se necesita al menos un día para visitar todos estos museos con tranquilidad.
El museo del folclore tiene muestras de la arquitectura popular noruega
5. La ópera de Oslo funde su blanco con el azul del mar. Es un edificio moderno de mármol y cristal que parece llevar toda la vida allí. Imprescindible pasear por encima de ella.
La ópera desde un barco por el fiordo
6.Vigeland Park. Unas 200 esculturas se reparten a lo largo de este parque, que se vuelve de color verde o blanco según la época del año. En ambos casos, es un lugar para ver pasar el tiempo, observar y sentirse observado.
Vigeland Park
7. Aker Brygge. La zona del puerto de Oslo mezcla tiendas y terrazas con vistas a los yates y al fiordo de Oslo. Con el buen tiempo, la gente se sienta sobre las tablas de madera a comer, a beber, o simplemente a observar. En invierno, existe la posibilidad de tomarte un chocolate caliente en alguna de las terrazas, tapados con mantas y con las calefacciones que “templan” el ambiente. Se experimenta un frío muy acogedor.
Aker Brygge
8. La paz que no es algo inmaterial en Oslo. Cada año, su ayuntamiento acoge la ceremonia del Nobel de la Paz, el único premio que no se entrega en el ayuntamiento de Estocolmo. En Oslo se encuentra el Centro Nobel de la Paz dedicado al galardón y a sus premiados. Además, Noruega encabezó en 2007 la clasificación del Índice Global de la Paz (Global Peace).
9. Munch y su año. En 2013 se celebra el 150 aniversario del nacimiento de Edward Munch. El autor de “El Grito” nació y vivió muchos años en Oslo, y es aquí donde se encuentra la mayor colección de su obra. Tanto el Museo Munch como la Galería Nacional albergan algunas de sus pinturas más famosas.
10. El Oslo Pass. Una tarjeta que da acceso al transporte y a la mayor parte de los museos de Oslo. Está disponible en 24, 48 y 72 horas e incluye también, tours guiados a pie y, en la versión de 3 días, un crucero por el fiordo. Cuesta para 1, 2 o 3 días 270, 395 y 495 NOK (36, 53 y 67€).
Y por supuesto, Oslo es el punto de entrada a un país increíble. Desde aquí podemos coger un tren hacia Bergen para visitar algunos de los fiordos más estrechos o embarcarnos en un crucero por la irregular costa oeste o volar hasta el norte para contemplar las auroras boreales y la naturaleza más allá del Círculo Polar Ártico.
Por si todavía te faltan motivos para visitar Noruega este año, seguro que una visita a las páginas de Visit Norway o Visit Oslo te ayudan.
¡Buen viaje!
Un barco alejándose del puerto de Oslo