Quedarse embarazada a los 40 años o después de los 40 años
Hasta los 45 años aún es posible quedarse embarazada, pero las posibilidades han disminuido ya que van bajando conforme pasa la edad. Aún así, muchas mujeres de más de 40 años se deciden a tener hijos, bien por el método habitual o utilizando tratamientos de fertilidad. Quince años antes de llegar a la menopausia empieza a disminuir el número de óvulos, por lo que las posibilidades son menores.
Varios estudios han demostrado que las madres con mayor edad suelen tomar decisiones más inteligentes, aunque esto también depende de la propia persona. Además, a esa edad se tiene más madurez, más responsabilidad y más estabilidad.
Al quedarse embarazada a los 40 años o más, la mujer tiene más probabilidades de tener diabetes o hipertensión en el embarazo, con sus consecuentes complicaciones, así como complicaciones en el momento del parto y problemas con la placenta. Los riesgos de tener un bebé prematuro son mayores que en edades anteriores.
Además, existen otros problemas para los bebés, que tienen más probabilidades de tener alguna enfermedad congénita, síndrome de Down o incluso esquizofrenia.
En cifras, un estudio ha afirmado que dos tercios de las mujeres que rebasan la edad de 40 años tienen problemas de fertilidad, a partir de los 40 años las probabilidades de tener un hijo con síndrome de Down son de 1 entre 82. Las posibilidades de dar a luz mediante cesárea de madres primerizas no se alejan demasiado de la mitad.
A pesar de eso, muchas personas siguen afirmando que quedarse embarazada a los 40 años no representa riesgos para madre ni para bebé, y es una fecha ideal, más todavía en los tiempos en los que estamos que cada vez la edad de independencia es mayor. Con un correcto control prenatal, una vida sana con dieta, ejercicio y suelo adecuado se pueden prevenir mucho las complicaciones.
A pesar de todas las complicaciones que se pueden presentar, que se demuestra en estadísticas, muchas mujeres mayores de 40 años han tenido y siguen teniendo hijos de bebés sanos y sin complicaciones en el embarazo.