Quédate con quien te mire siempre como si te estuviera viendo por primera vez.
Quédate con el que te abraza sin que tengas que pedirlo, el que sabe qué necesitas con solo una mirada.
Quédate con el que te ve mal maquillada, despeinada, con ropa de andar por casa y aún así te dice “estás guapa” aunque no sea verdad porque él sabe que la sinceridad está sobrevalorada.
Quédate no con quien sea como tú sino con quien tenga lo que a ti te hace falta. Lo que necesitas para sentir que no sois iguales sino partes complementarias.
Quédate donde veas sonrisas, donde escuches palabras o dónde tú sientas que tienes que quedarte.
Quédate donde tú quieras, no dónde te diga nadie que lo hagas.