Queen no necesitan presentación, un grupo que ha regalado al mundo un buen puñado de canciones clásicas, que tenía uno de los directos más demoledores y uno de los líderes más carismáticos sobre un escenario, Freddie Mercury, y cuya música es tan característica que resulta imposible confundirlos con ninguna otra banda.
Integrantes de la banda Smile: Brian May, Tim Staffell, Roger TaylorLos comienzos de la agrupación los podemos establecer en la época de comienzos de los años setenta. Con un estilo musical propio, que iba desde la combinación entre el sonido de Led Zeppelin y el glam-rock enriquecida con esmeradísimas armonías vocales y melodías pegadizas. Los orígenes de Queen se remontan a un grupo llamado Smile, fundado a finales de los años sesenta por el guitarrista Brian May, el batería Roger Meddows-Taylor y el cantante y bajista Tim Staffel, todos ellos estudiantes del London Imperial College. El fracaso de su primer single, ‘Earth’, causó el abandono de la formación por parte de Staffel y su sustitución por Frederick Bulsara cuyo nombre artístico era Freddie Mercury. Fue precisamente Mercury quien sugirió cambiar el nombre del grupo por Queen y el cual provocaría el comienzo hacia el estrellato del grupo.
No sería hasta febrero de 1971 cuando realmente la formación se consolidó, ya que la banda no siguió la habitual rutina de los grandes grupos de la época caracterizándose por sus inicios con conciertos en los pubs y en los clubes de la ciudad natal de los artistas. El grupo prefirió continuar sus estudios (May obtuvo la licenciatura en astronomía, Deacon en electrónica, Taylor en biología y Mercury en diseño) y concentrarse en la composición de temas nuevos y en el perfeccionamiento de su repertorio.
En 1972 la banda consiguió firmar su primer contrato discográfico, tras haber grabado algunas cintas de prueba en los De Lane Lea Studios, gracias al interés de los especialistas de sonido Roy Thomas Baker y John Anthony. Una pequeña compañía de producción, Trident, financió con un bajísimo presupuesto, la grabación de su primer álbum, ‘Queen‘: un trabajo lo suficientemente prometedor como para permitirles obtener un nuevo contrato, esta vez con EMI Records.
Tras ese éxito inicial la compañía discográfica se embarcó en una campaña propagandista costosa pero mal coordinada para tratar de lanzar la popularidad del grupo, la publicación del álbum se postergó muchas veces, y todo ello hizo que Queen fueran considerados como un grupo “prefabricado” por la promoción discográfica y falto de calidad. El álbum y el single que se extrajo de él, ‘Keep yourself alive’, no entraron en las listas de éxitos, pero algunas apariciones televisivas y su participación como teloneros en la gira inglesa de 1973 de Mott The Hoople sentaron las bases de su popularidad.
EI segundo álbum, ‘Queen II‘, publicado en marzo de 1974, coincidiendo con su primera gira como cabezas de cartel, entró en el Top Ten británico, al igual que el single extraído del mismo álbum, ‘Seven seas of rye’. ‘Queen II’ sacó a la luz el papel de compositor de Mercury dentro de la banda, el cual había compuesto todos los temas del lado “negro” del disco, y el de May, que había firmado todos los del lado “blanco“. Pero, en un futuro inmediato, también Deacon y Taylor contribuirían activamente a la ampliación del repertorio del grupo (Deacon, en particular, fue el autor de ‘Another one bites the dust’, uno de los mayores éxitos internacionales de la banda), garantizando a Queen una variedad estilística muy positiva.
En mayo de 1974 la banda partió para su primera gira por Estados Unidos, también como teloneros de la banda Mott The Hoople. Una desafortunada enfermedad del integrante del grupo Brian May, el cual enfermó de hepatitis y poco después agravado por una úlcera, impidió realizar la gira. Tiempo durante el cual el grupo aprovechó el período de inactividad forzosa para componer y grabar las canciones del que sería su tercer álbum, ‘Sheer heart attack’. Publicado a finales de 1974, el disco es tan rico en ideas que acalló incluso a sus más frenéticos detractores. El single ‘Killer Queen’ se convirtió en un éxito en medio mundo, llegando hasta el número dos de las listas de éxitos inglesas, y ganando también un “Ivor Novello Award” como mejor canción de 1975.
Queen durante la grabación de A night at the operaEn ese mismo año Queen grabaría su disco más ambicioso, ‘A night at the opera’, definido como “el proyecto discográfico más costoso jamás realizado”. Cuatro meses en los estudios de grabación (en siete estudios diferentes) y 35.000 libras esterlinas de coste (récord superado con creces por ellos mismos en 1980 con ‘The game’, con un presupuesto total de 100.000 libras esterlinas por once meses de grabación). El álbum y el single que lo anticipa, ‘Bohemian rhapsody‘, fueron el detonante del éxito internacional del grupo. El single del álbum es un tema extraordinario caracterizado por su sunido barroco, una introducción en clave de balada acústica seguida por una secuencia en estilo pseudooperístico y un arrollador final heavy metal a lo Black Sabbath.
El single continuó en cabeza de las listas inglesas durante nueve semanas, mientras que el álbum se instaló por largo tiempo en las listas de éxitos. En la nochebuena de 1975 actuaron en el Hammersmith Odeon, y el concierto fue transmitido en directo por la BBC. A comienzos de 1976 el grupo era tan popular que toda su discografía, cuatro álbumes, estaba en el Top 30, incluido su primer álbum, ‘Queen‘. En este período rescindieron su contrato con la agencia Trident, con el productor Roy Thomas Baker y el manager Jack Nelson. Separación no que fue muy “amistosa” y que motivó la creación de la canción ‘Death on two legs‘ en la cual el grupo llama al propio Roy Thomas Baker “tiburón”. El siguiente álbum, ‘A day at the races’, fue producido por ellos mismos; el nuevo manager era John Reid.
En los primeros meses de 1976 la banda realizó una gira por Estados Unidos, Japón y Australia. Sus conciertos, muy espectaculares, les hicieron aún más famosos: humo, luces y explosiones potenciaban su show en directo. Durante la gira de 1977 (año del Jubileo de la reina de Inglaterra) una corona enorme, de dos toneladas y media de peso, aparecía suspendida sobre el escenario al inicio y al final del espectáculo, mientras sonaban las notas del himno nacional inglés. Pero el componente fundamental de los conciertos de Queen era la extraordinaria presencia escénica de Freddie Mercury. Mientras Deacon y Taylor se encargaban de mantener una sección rítmica potente y nítida, y Brian May sólo se destacaba para realizar sus largos y virtuosos solos de guitarra, Mercury se convertía así en un auténtico “showman”, con sus poses atléticas, sus pasos de baile, sus continuos cambios de vestimenta y su comportamiento exhibicionista. “Siempre he sabido ser una estrella” (ha declarado Mercury) “y por fin el mundo se ha dado cuenta”.
En la época de la explosión del punk rock, en 1977, Queen encarnaban a la perfección todo lo que el nuevo movimiento despreciaba. Atacado también por la prensa musical, el grupo adoptó una actitud de silencio frente a la prensa. Pero cabe resaltar que el álbum de 1977, ‘News of the world’, saca a la luz una dura agresividad, ausente en los anteriores trabajos. Más tarde, Brian May comentó: “En los álbumes anteriores habíamos trabajado siempre sobre las estructuras rítmicas de base. El fin era alcanzar la perfección. En este nuevo disco, por el contrario, queríamos recuperar la espontaneidad”. Los ataques del movimiento punk no afectaron su trayectoria y el grupo publicó álbumes mas tranquilos como ‘Jazz‘ (1978), el doble en directo ‘Queen live killers‘ (1979) y ‘The game‘ (1980).
David Bowie y Freddie MercuryLos dos singles de mayor éxito de este período demostraron la habilidad de la banda inglesa para afrontar estilos y géneros diferentes: ‘Crazy little thing called love‘ es un rockabilly al estilo años cincuenta, ‘Another one bites the dust’ es un episodio disco funk típico de los años ochenta. En 1980 compusieron e interpretaron la banda sonora de ‘Flash Gordon‘. En 1981 el grupo fue la primera banda de nivel internacional que emprendió una larga gira por Suramérica, continente en el cual hasta ese momento sólo habían realizado algunas breves giras Peter Frampton y Earth, Wind & Fire, obteniendo un inmenso éxito en Brasil y Argentina y abriendo un mercado inexplorado y poco aprovechado. En el mismo año llevaron a cabo una sofisticada “fusión” entre rock y dance en el álbum ‘Hot space‘, y volvieron al número uno de las listas de singles con un tema grabado a dúo con David Bowie, ‘Under pressure’. El álbum alcanzó en pocas semanas el cuarto puesto en las listas de éxitos inglesas, y en América llegó al vigesimosegundo puesto.
Con la llegada del verano Queen emprendieron una gira europea, durante la cual actuaron en el Milton Keynes Bowls, donde participaron en un programa televisivo de la prestigiosa cadena inglesa Channel 4. La gira prosiguió en Norteamérica y concluyó en Japón. Antes de que finalizase el verano aparecieron otros dos singles: ‘Las palabras de amor’, a primeros de junio, y ‘Back chat’, el 9 de agosto. Al final de la gira la banda decidió abrir un período de reflexión. “Un momento de descanso”, declararon a la prensa.
Brian May con Eddie Van HalenEl descanso se alargó dos años, el doble de lo previsto. Pero mientras tanto, el 21 y 22 de abril de 1983, Brian May participó en una sesión de grabación realizada en los famosos Record Plant Studios de Los Ángeles con Eddie Van Halen a la guitarra, Fred Mandel a los teclados, Phil Chen al bajo y el batería de R.E.O. Speedwagon, Alan Gratzer. De esta sesión se extrajo en noviembre el single ‘Star fleet’, inspirado en una serie infantil de dibujos animados japoneses.
Con el comienzo del nuevo año, al mismo tiempo que su histórica aparición en el “Festival de San Remo”, la banda publicó un nuevo single, ‘Radio Gaga’. El tema, mitad pop y mitad dance, es según Mercury: “Una canción contra el uso indiscriminado del medio radiofónico, que se ha convertido en un instrumento de persuasión oculta”. No obstante, el tema obtuvo un gran éxito precisamente entre los amantes del llamado “FM-rock” (rock para el público más joven), que lo catapultaron a las listas de éxitos de todo el mundo. El disco triunfó también en Inglaterra, devolviéndoles al primer plano de la popularidad. Tras dos años de meditación, la banda reapareció muy cambiada, tanto en su imagen como en su música.
Abrigos y cuero, preferiblemente rojo, y el pelo cortado al cero eran el nuevo uniforme. Una imagen a la que Mercury añadió unos espléndidos bigotes. Los sintetizadores, caja de ritmos y sonidos electrónicos, sin embargo, influyeron negativamente en su creatividad musical. Este cambio, nefasto en el plano estrictamente artístico, llevó a Queen a conquistar nuevos fans. El álbum ‘The Works’ obtuvo un discreto éxito, a pesar de no merecerlo. Por el contrario, el vídeo de Radio Gaga, basado en algunos fragmentos de Metrópolis, película rodada en 1926 por Fritz Lang, era muy bueno.
Después de realizar actuaciones propagandísticas en las televisiones de toda Europa, la banda dispuso emprender una gira. La salida estaba prevista para agosto de 1984, pero la afortunada gira sufrió un incidente “diplomático”. Tras ofrecer ocho conciertos en Sun City, Las Vegas de la Sudáfrica racista, Queen terminó estando en el punto de mira más negativo de la sección de cultura de las Naciones Unidas por actuar en una zona en pleno movimiento apartheid relazando un movimiento que por aquel entonces se trataba de eliminar.
Queen durante la actuación de Rock In RioEn octubre apareció el primer single en solitario de Freddie Mercury. Se trata de ‘Love Kills‘, extraído de la banda sonora de Metrópolis en el cual apostaba por un estilo de música discotequero que no cayó demasiado bien entre la crítica de por aquel entonces. La banda decididamente encauzada en el rock comercial, realizó para la Navidad de 1984 el single ‘Thank God it’s Christmas‘, y en enero de 1985 participó en el festival brasileño “Rock in Rio”, junto a Rod Stewart, AC/DC, Whitesnake y Tina Turner. El primer álbum en solitario de Freddie Mercury, que apareció en mayo de 1985, se titula ‘Mr. bad guy’, y es un proyecto que demuestra su egocentrismo. El disco, producido y escrito enteramente por Freddie, incluye el tema ‘Foolin Around’, banda sonora de la película ‘Teachers‘. En el mismo período el batería Roger Taylor se divertía produciendo junto al actor Jimmy Nail una versión de ‘Love don’t live here anymore’, un éxito de 1979 del grupo pop soul Rose Royce.
A pesar del amor de los fans, el grupo prefirió sacrificar durante algunos meses sus compromisos colectivos y dejar lugar a las iniciativas solistas de sus componentes. Taylor trabajó como productor en el álbum ‘Loving you‘, de Feargal Sharkey, mientras que Mercury, para celebrar sus treinta años, fiel a sus manías de grandeza, montó una increíble fiesta en Mónaco, en la que se presentó vestido de cosaco. En esta juerga se rodaron algunas secuencias para el vídeo de ‘Living on my own‘.
Freddie Mercury vestido de cosaco para su fiesta en MónacoEl 5 de noviembre apareció en toda Europa el nuevo single del grupo: ‘One vision‘, extraído de la banda sonora de la película ‘lron Eagle‘. En esos mismos días Brian May y John Deacon trabajaban en el álbum ‘Ice on fire’, de Elton John. En este momento, para contribuir a rodear a la banda de una imagen de solidez, la EMI inglesa lanzó al mercado ‘The complete works‘, un estuche de catorce discos que incluye todos los trabajos del grupo (excepto ‘Greatest hits’) más un disco inédito. El 17 de marzo de 1985 se publicó en todo el mundo el nuevo single, ‘Kind of magic’, título del inminente nuevo álbum. Del mismo álbum, publicado el 12 de junio, se extrajeron tres temas para la banda sonora de la película ‘Highlander‘.
A pesar de esta buena racha, la banda se resquebrajaba cada vez más. Los cuatro Queen estaban más implicados en sus proyectos individuales que en el de hacer resurgir la banda: Mercury colaboraba en la grabación de tres temas del musical ‘Time‘, de Dave Clark, y además, llegó a publicar un videoclip suyo durante el concierto que la banda ofreció en el Wembley Stadium de Londres; John Deacon formó el grupo The Immortals, con los que grabó ‘No turning back’, para la banda sonora de la película ‘Biggles‘. De esta manera las fisuras dentro de la banda empezaro a ser cada vez mayores pero a pesar de ello se recompusieron con una gira europea, que culminó con una actuación en Budapest frente a 80.000 personas. Del concierto, se filmó la película ‘Queen live in Budapest‘.
El grupo volvía a reinar en Europa, llevando varios singles a los primeros puestos de las listas. Habían recuperado el éxito de los buenos tiempos y la compañía discográfica les apremiaba para que publicaran otro disco en directo. El 2 de diciembre de 1986 apareció ‘Live Magic’, que antes de fin de año consiguió el tercer lugar en las listas de éxitos inglesas. Los cuatro intengrantes de la banda viendo como la recuperación del grupo ya era una realidad, decidieron tomarse unas vacaciones, dedicándose cada uno por su cuenta a sus proyectos personales. Mercury publicó en mayo de 1987 un nuevo single, una acertada versión de la famosa ‘The great pretender‘, escrita por Buck Ram, un antiguo éxito de la banda The Platters que se había publicado treinta años antes.
Freddie Mercury y Montserrat Caballe durante la presentación de “Barcelona”En julio Mercury, en una entrevista concedida a la televisión española, declaró que estaba en Barcelona para conocer a la famosa soprano Montserrat Caballé. Nueve meses más tarde, en marzo de 1987, Mercury y Montserrat Caballé comían juntos en el hotel Ritz de Barcelona. Freddie había grabado dos canciones escritas expresamente para ella y le ofreció escucharlas. Montserrat Caballé quedó entusiasmada y decidieron grabar un álbum juntos. Al domingo siguiente la soprano sorprendió a todos (incluido Mercury) cantando una de sus canciones, ‘Exercises in free love’, como bis de su recital en el Covent Garden de Londres.
Durante esa misma actuacióm, en los camerinos del Covent Garden, Montserrat le pidió a Freddie que escribiera una canción dedicada a Barcelona, su ciudad. El tema, titulado simplemente ‘Barcelona’, fue grabado en abril de 1987 y presentado en directo para el mundo entero el 29 de mayo al final del show televisivo “Ibiza ’92”. El éxito fue grandioso y dio luz verde al álbum homónimo, publicado en octubre de 1988. El tema ‘Barcelona’ fue elegido por el Comité Olímpico Español como himno oficial de las Olimpiadas de 1992.
Los restantes miembros de Queen no permanecían inactivos. En octubre de 1987 Taylor, el único capaz de “competir” en proyectos en solitario con Mercury, fundó Cross, una banda de rock&roll. Su primer álbum, ‘Shove it’, se publicó en febrero de 1988, seguido por una mini gira. Al mismo tiempo, Brian May produjo una versión irónica de ‘Bohemian rhapsody’, realizada por The Young Ones, y el primer álbum de su novia, la actriz Anita Dobson, titulado ‘Talking of love‘. Es de señalar, en el invierno de 1887, el lanzamiento del vídeo titulado ‘Queen magic years’, que se sumaba a la amplia producción de la banda, que ya incluía ‘We will rock you (the video)’, ‘The works!’, ‘Queen live in Rio’ y ‘Queen live in Budapest’. De todos modos, entre proyecto y proyecto, encontraron tiempo para preparar un nuevo disco en común. ‘The Miracle’ se publicó el 22 de mayo de 1989 y constituyó un verdadero milagro.
Fragmento del vídeo The MiraclePor vez primera, todos los temas están firmados por los cuatro componentes de la banda; y, a pesar de no ser una obra maestra, obtuvo un gran éxito gracias sobre todo al single ‘l want it all’, realizado sobre el modelo de todos sus éxitos anteriores. Queen recuerdan que también saben ser unos rockeros endiablados y mezclan el heavy metal de sus viejos tiempos con las refinadas armonías vocales. La guitarra de Brian May tiene aún algo que decir y la atmósfera general, textos incluidos, es nostálgica. ‘The miracle’ representa, en conjunto, un punto de llegada y un nuevo punto de partida.
Durante 1988 y tras una larga época de inactividad, comenzaron a extenderse los rumores de que Mercury estaba padeciendo SIDA. Situación que el cantanto negó abiertamente, insistiendo que solo estaba “exhausto” y demasiado ocupado para proporcionar entrevistas. Sin embargo, la banda decidió continuar haciendo álbumes libres de conflictos internos y diferencias, comenzando con el citado The Miracle y siguiendo con Innuendo, el cual fue grabado durante 1990. No sería hasta principios de 1991, cuando el nuevo álbum vería la luz debido a que la salud de Mercury se instituyó como un factor predominante en el retraso.
A pesar de que su salud cada vez se iba deteriorando más y más, Mercury continuó contribuyendo en la banda. El 23 de noviembre de 1991, en una declaración preparada en su lecho de muerte, Mercury confirmó que tenía SIDA. A casi 24 horas de la emisión de la declaración, Freddie Mercury falleció de una bronconeumonía. Su funeral fue de carácter privado, en concordancia con la fe zoroástrica, religión profesada por su familia.
“Bohemian Rhapsody” fue re-lanzado como sencillo poco después de la muerte de Mercury, con
Fotrografía del concierto homenaje a Freddie Mercury“These Are the Days of Our Lives” como tema principal. El sencillo logró el número 1 por segunda vez en el Reino Unido. La recaudación inicial del sencillo fue donada íntegramente a la fundación Terrence Higgins Trust. La popularidad de Queen tras la publicación del sencillo se incrementó nuevamente en Estados Unidos sobre todo después de que el tema “Bohemian Rhapsody“ fuera presentado en la película de comedia Wayne’s World, ayudando a la canción a alcanzar el número 2 en las listas estadounidenses en 1992.
El 20 de abril de 1992, se realizó el Concierto en Tributo a Freddie Mercury en el estadio de Wembley en Londres. Entre los artistas invitados estuvieron Annie Lennox, David Bowie, Def Leppard, Elizabeth Taylor, Elton John, Extreme, George Michael, Guns N’ Roses, Ian Hunter, Lisa Stansfield, Liza Minnelli, Metallica, Mick Ronson, Robert Plant, Roger Daltrey, Spinal Tap, Tony Iommi y Zucchero, junto a los tres miembros restantes de Queen, interpretando varios de los éxitos más grandes de la banda. Fue un concierto grandioso que fue televisado a más de 1 billón de telespectadores a lo largo del planeta. El concierto está registrado en el Libro Guinness de Récords como “El concierto benéfico con más estrellas de rock”. Se recaudaron más de 20.000.000£ destinados a obras caritativas para el SIDA.
Y para la finalización de este post que mejor que recordar a los Queen con dos de sus más míticas canciones en directo, no os perdáis su actuación del siguiente vídeo. Simplemente ¡Espectaculares!