Revista Diario

Querida madre

Por Desmadreando @desmadreando

Sé que leerás esto porque se ha convertido en la última forma de comunicarnos. Hemos dejado atrás esas cartas que me escribías en la pubertad para “modernizarnos” con emails, presentaciones varias de power point, cadenas de la buen suerte y “el desmadre” que me monté y que te llega a tu correo.

Cuando nació Critter recuerdo que me dijeron: “que bueno que es niña así no morirás sola”. Es terrible la frase pero también es grandiosa. Las niñas suelen hacerle compañía a sus madres.

Sin embargo yo estoy lejos.

Cuando iba a casa de mi Yaya y veía ésta foto que tenía tuya de pequeña siempre me preguntaba porque Diosito no me había hecho tan bonita como tú. Yo quería ser como tú mamá. Y hoy lo sigo pidiendo.

 

Querida madre

                                     Que sepas que me llevo la foto en mi maleta.

Eres la mejor madre que puede existir y con tu ejemplo me has enseñado que la maternidad es dura pero es lo mejor que te puede pasar en la vida. Yo no sé tejer como tú, yo no sé pintar como tú, pero ahora que soy madre sé todo lo que hiciste para entretejer una familia y para pintar la mejor vida para todos tus hijos. GRACIAS.

Mamita no soy buena para las despedidas. Seguro nos pelearemos, seguro nos gritaremos como buenas Tauro y Leo que somos, seguro me dirás “que bueno que ya te vas” y yo diré “que bueno que me voy a mi casa” pero en el fondo sabemos que nos hacemos falta.

Gracias por cuidar de mi hija y enseñarle tanto.

Ayer me preguntabas si me acordaba de mi Yaya pues quizás Critter no se acordará de ti… y te digo que ¡por supuesto me acuerdo de mi Yaya! y para Critter eres su Yayita. Dejó de abrazar el ordenador y pedir el skype para correr a despertarte cada mañana con un “Hola yayitaaaaaaa”.

En este mes Critter aprendió a hablar gracias a ti. Gracias por bañarla, por mimarla, por bajarle la calentura, por cantarle las canciones que me cantabas de pequeña…

Gracias por hacer de mi regreso, una reconexión espiritual. Venir a México me llena de alegría, reconecto con mi ser, con mi origen y con esa gran familia que creaste.

Pero sobretodo ¡GRACIAS POR SER MI MADRE!

Te amo con todo mi corazón.

Te veo pronto.

 


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