La asociación noruega Care Norway difunde este como parte de su campaña en contra de la violencia machista. En el que una niña habla a su padre, todavía desde el vientre de su madre, narrando lo que será su vida como consecuencia de haber nacido niña. La pequeña insta a su padre a tener en consideración a las mujeres al igual que a los hombres, a no despreciarlas por su género, y por ello insta a todos los padres y no padres, a todos y todas las educadoras y sobre todo a todas las personas.
En laaudio-carta explica cómo a la edad de 14 años los niños de su clase habrán bromeado sobre ella llamándola perra, zorra y puta. Con 21 años sería violada y posteriormente encontraría al amor de su vida con el que casaría y con el que todo se volvería negro. Y por todo ello pedifía un favor: "Papá no dejes que mi hermano llame putas a las chicas, porque no lo son". El ser hombre o mujer, negro o blanco, heterosexual u homosexual, deficiente o intelectual no debería nunca ser motivo de ningún tipo de discriminación social, ni de ningún otro ámbito. La mejor manera de combatirlo o probablemente la más efectiva, tiene la clave en la educación.
El vídeo está disponible en inglés con subtítulos en español.
