Revista Cultura y Ocio
Querido primo Jordi:Te escribo estas líneas electrónicas desde la capital del Reino de León o País Leonés, como a ti te gusta decir. Ante todo, quiero desearte mucha suerte en este importante domingo electoral para ti y para los tuyos.¿Qué tal tus padres? ¿Por fin se jubilan? La abuela está muy pesada con el tema, dice que vengáis para el pueblo, que como salga lo de la independencia pasará lo que a sus padres con sus hermanos y la familia quedará dividida en dos bandos. La pobre está pasando un mal trago. Se acuerda mucho del abuelo y quiere que nos juntemos todos en la fiesta de San Jorge como años atrás para llamarte Jorgito y nosotros escojonarnos de ti. ¡Parece que fue ayer cuando pasábamos juntos los veranos en casa de los abuelos en el pueblo! Y han pasado tantos años... ¿Te acuerdas de la francesa que te dio tu primer beso con 15 años en la fiesta del pueblo y te enamoraste como un loco? Jajaja... ¡La vara que me diste! ¡Le gustaba yo y te besó a ti! Nunca se me dio bien el francés. Se casó la semana pasada y dicen que se va a separar porque él no sé qué líos tiene... Bueno, cosa de giris.Hablando de giris, ¿cómo se presenta el domingo? Por aquí todo el mundo está expectante, la mayoría: hasta los huevos del tema. Muchos quieren que "os independicéis de una puta vez y que nos dejéis vivir tranquilos" (casi todos merengones, ya sabes... el fútbol) y otros son capaces de coger la escopeta y embarcarse donde sea para defender la patria. Lo cierto es, que nadie sabe a ciencia cierta qué pasará. La sensación es que los políticos nos están empujando a donde sólo quieren ir ellos. La gente solo necesitamos trabajar y vivir tranquilos aunque sea con cuatro duros y nos dejen de política e historias. Bueno, primito te deseo un domingo tranquilo. Que la ilusión supere la posible decepción o la decepción sea lo bastante ilusionante para seguir persiguiendo un sueño imposible.Un saludo. Ah, ya te envié la camiseta esmoquin de nuestra Cultu y te recuerdo que me debes la catalana de nuestro Barça.P.D. Pase lo que pase el 27S en el pueblo siempre serás Jorge, el hijo de Prudencio, el que se marchó a trabajar a Martorell y se casó con la sevillana.