No pasa ni un solo día en que los políticos de este país no me den más asco. Ahora resulta que el PP, en un alarde populista, ha decidido hacer asesor en materia de justicia a Juan José Cortes, más conocido por ser padre de la niña Mari Luz, asesinada en Huelva. La pregunta que inmediatamente me viene a la cabeza, es porque el, y no por ejemplo los padres de Yeremi, ese niño canario que lleva 7 años desaparecido, y que sus padres no tienen siquiera una lapida a la cual llorar, o la de otros tantos que están desaparecidos o han sido también asesinados. Pues no, deciden hacer asesor, a un señor que dejó a una niña de 5 años salir sola a la calle, y si ya es arriesgado dejarlos salir por un barrio normal, lo suyo alcanza niveles de negligencia, cuando descubrimos que resulta que ya sabían y conocían de las perversiones y desviaciones de uno de sus vecinos, el cual resulto posteriormente el autor de tan execrable crimen. El dicho de que "el que no llora no mama", en este caso queda totalmente demostrado.
Pues nada, otro más que se sube a carro de los mamones de este país, como si hubieran pocos.