¿Quién quiere que los hombres usen faldita?

  

Es cada día más común ver como se feminiza el atuendo masculino, mientras éste hecho parece no ser percibido por los jóvenes y no tan jóvenes, que cada día más, adoptan modas y costumbres anteriormente exclusivos de las mujeres.

Parece exagerado pensar que este fenómeno sea fruto de una conspiración mundial, pero tiene ciertas características que apuntan a que tal liberalismo e innovación, no es mas que estrategias de negocios, para proporcionar un mayor margen de ganancias a ciertas industrias, que no se conforman con haber acaparado al público femenino y por lo tanto ahora van por ustedes hombres.

Anteriormente, nadie se imaginaba a un hombre invirtiendo su tiempo frente a un espejo, colocándose diferentes pendientes, para ver cual de ellos le queda mejor, o combina más la ropa que eligió, y el maquillaje donde lo dejamos, ahora las madres no tendrán que estar pendientes del momento en el que los chicos comenzaran a utilizar espuma de afeitar y rasuradoras, ya que también tendrán que comprar, maquillaje, secador de cabello, invertir en tratamientos capilares para alasear sus melenas, sin contar que en el caso de no conseguir su pinza de cejas, probablemente sea su hijo quien la tiene.

En cuanto a la ropa, pantalones cada día más y más ajustados, y para ser sinceros hay chicos a quienes no les favorece para nada este estilo, pero como esta de moda, no se puede hacer más, hay que usarlos, las blusas cada vez mas femeninas, en formas, colores, y telas, al igual que los accesorios.

                                                 

Hasta dónde va a llegar esto, será que de un momento a otro no vamos a poder distinguir a simple vista quien es hombre y quién mujer. Por un lado, se nos vende la idea de ser originales y diferentes, de no ser uno más del montón, pero por el otro, día a día, no se quienes, pero se están encargando, de que ya no se pueda hacer la diferencia, ya no seremos iguales en diferentes grupos, sino todos iguales.

Y cada vez todos con mas y mas necesidades de consumo. Piénsalo nuevamente, cuando te vistas y creas que vas a llamar la atención por lo original de tu outfit, ¿será que ni siquiera es nuestra decisión lo que vestimos?, ¿Quiénes realmente elegirán nuestra ropa? No queremos que sean nuestros padres, pero de seguro alguien más ya se encargó de eso.

Todo esto promovido por artistas y deportista de moda, cuya apariencia se esgrime como la meta a ser alcanzada, porque si te pareces a tal o cual artista, si eres cool, y te da la sensación de tener o algún día poder alcanzar el estilo de vida de dicho personaje, realmente juegan con los sueños y esperanzas de las personas para beneficiarse. Y en fin si somos felices así, pues sigámonos disfrazando de nuestro artista favorito.