¿Existe este síndrome en las situaciones actuales que se dan en Atención primaria? Os explicaré lo que me pasa:Llevo, por decisión propia, treinta años en atención primaria la mayoría del tiempo atendiendo pacientes en un tramo horario como único médico, durante este tiempo no me he considerado que estuviera "quemado" (síndrome de burnout profesional) de forma habitual, aunque no niego que en algunos momentos de mi vida profesional lo he sentido en mis propias carnes, aunque lo he solucionado realizando actividades diversas, cambiando estas actividades e intentando hacer de mi trabajo una forma de diversión.He aspirado a estar actualizado en mi desempeño profesional, he intentado trabajar dentro de los planes, estrategias y objetivos de mi empresa, sin perder nunca de vista el principal y primer empeño: la atención de los pacientes de forma empática, científica y profesional, dentro de mis posibilidades.He velado por la salud de una cantidad ingente de pacientes, a veces más de 100 por día incluidos los avisos a domicilio y urgencias durante la jornada ordinaria, de lo cual me he quejado por diversas vías, por su puesto a través de las oficiales, aunque también en Twitter, o este otro, en mi Blog, o esta otra sin embargo incluso en esas circunstancias he ansiado hacer bien mi trabajo.
Tras todos estos años, hace ya más de 100 días que me han reducido el número de pacientes, porque han integrado en el consultorio otro médico/a y enfermera/o más, así que ahora estoy ávido de atender pacientes, llego a la consulta por la mañana y no me están esperando para abordarme los pacientes, atiendo menos de 40 pacientes por día, tengo muy pocos avisos a demanda domiciliarios, o sea me encuentro raro después de tantos años, he puesto hasta unos kilos, a pesar de seguir utilizando la bicicleta en el trabajo.
Hace pocos días me vi dando vueltas por las calles del pueblo buscando algún paciente al que visitar a domicilio que no hubiese visto ya esa semana, de los que me han dejado,a veces me veo diciéndole a pacientes de la sala de espera, que ya no están entre los asignados a mi cupo,que pasen a mi consulta, estoy haciendo clic con el ratón en inexplorados rincones de la historia digital que nunca había estado, incluso en las últimas semanas me veo realizando otras tareas, como cambio de ubicación de mobiliario, revisión de caducidades de medicamentos, limpieza de polvo de algunos enseres...
Tras estos trastornos he revisado diferentes manuales y he llegado a una conclusión: tengo un síndrome de Estocolmo, este síndrome es común en personas que han sido víctimas de algún tipo de abuso y desarrollan una relación de complicidad y un fuerte vínculo afectivo, con quien las ha dañado física y/o psicológicamente, éste comportamiento surge debido a la presión psicológica que tiene la persona al saberse aislado, abandonado, amenazado y quizás olvidado. Ha recibido también otros nombres como “Síndrome de identificación de supervivencia”.
Nunca éste síndrome se ha caracterizado como un conjunto clínico de signos y síntomas bajo una misma entidad para considerarse una categoría psicopatológica con diagnóstico diferenciado, y que conste que me encuentro perfectamente: llego al trabajo sin el ansia de saber que me esperan 5 ó 6 pacientes a la vez con problemas más o menos urgentes para ellos, hablo con mis compañeros antes de comenzar a trabajar, hago todas las actividades para atender a los pacientes de forma correcta, pausada, sin estrés, más feliz en el trabajo, tengo tiempo la mayoría de días para otras actividades, incluso me estoy repasando algunos Procesos Asistenciales Integrados en horario laboral. Curiosamente me embarga un sentimiento de agradecimiento a quien ha decidido poner un nuevo equipo medica/o-enfermero/a en el consultorio donde trabajo.
Después de leer esto ¿creéis que realmente es posible que tenga un Síndrome de Estocolmo?
Médico Rural