Las palabras se quedan cortas para describir la longevidad ganadora de este auténtico monstruo del tenis cuya fuerza supera a la de un titán. Rafa Nadal es una autentica pared de granito, sin fisuras, un muro que no ofrece esperanza a sus rivales de ser franqueado. ¿Y qué podemos decir que no hayamos dicho ya del mejor tenista de la historia sobre la tierra batida? ¿Qué podemos añadir al deportista más seguido y admirado de nuestra página?
Su victoria número 66 en Roland Garros le convierte en el tenista que más triunfos acumula en ese torneo, 9 tronos logrados, imposible de superar en los próximos 100 años.
En la batalla de la final Rafa, el Rey de los mosqueteros, terminó imponiéndose al serbio, el gran Djokovic relegado al olvido, al anonimato, ya que solo ha habido un protagonista en la final, en el torneo y en la historia de este grand Slam.
Podemos comentar el partido, que ha finalizado 3 set a1. Podemos comentar el torneo que ha realizado, como siempre de menos a más, cuyo punto de inflexión fue la paliza a David Ferrer en cuartos de final. Pero es imposible explicar lo obtenido hasta hora: una sola derrota en 10 años cuya estadística aumentará a buen seguro, salvo que a la organización del Roland Garros se le ocurra jugar en una piscina, en caso, claro, de que Nadal no sepa nadar.
El número 1 del tenis,Rafa Nadal, el verdadero special one, el only one, el auténtico rey del deporte español, ya no llora al conseguir triunfo en la Rod Laber. Ya es costumbre, como el que viaja a Paris a comprar una postal de la Torre Eiffel. Y sin embargo sigue luchando y corriendo como el primer día, lo que amedrenta a los rivales.
Gracias Nadal por no defraudarnos a los que te seguimos año tras año, en un momento en el que no tenemos demasiadas alegrías proporcionadas por los representantes de nuestro país. Gracias por todos los grandes momentos y por os que vendrán.