Rain World es otro de estos productos indie con una estética pixelada que tan de moda están en los últimos años, y que tanto nos gustan, y ya no solo por lo interesante de su diseño, si no porque es capaz de demostrarnos que supura amor, jugabilidad y diversión con un simple video. Por eso os rogamos que le echéis una manita monetaria para que joyitas así no queden en el olvido.