Está contento el PP con el último sondeo que le atribuye 12,6 puntos de ventaja sobre el PSOE en las elecciones del 20N, pero debería fijarse más en la tendencia del voto, que va acercando a ambos partidos.
El sondeo que le da el 47,6 por ciento a Rajoy contra el 35,0 de Rubalcaba fue obra de la consultora DYM, que a principios de agosto hizo 1.076 entrevistas telefónicas.
Publicado por el diario ABC, el histórico de investigaciones anteriores indica que el PP comenzó a adelantar al PSOE a partir de noviembre de 2009.
Entonces, hace 19 meses, los populares superaban en 5,2 puntos a los socialistas, y en junio de 2010, hace ahora catorce meses, la cifra subía a 9,2 puntos.
Pero hace ocho meses, en diciembre de 2010, el sondeo le daba al PP 49,3 puntos frente a los 30,8 del PSOE: el 18,5 por ciento de diferencia.
Fue cuando algunos medios afirmaron que los socialistas se hundían, y que se convertiría en un partido poco más que testimonial: los peperos más entusiastas hablaban de 50-60 diputados socialistas.
Pues, atentos: en este último resultado de agosto, con Rubalcaba ya como candidato, el PSOE recupera 5,9 puntos con respecto a diciembre.
El sondeo no indica cuál fue la recuperación desde el 27 de mayo, cuando forzaron a dedo el relevo de Zapatero.
Dada la capacidad del político cántabro para organizar maniobras demoledoras contra el rival, el PP podría quedarse sin su esperado triunfo o sin su mayoría absoluta.
Imaginemos que ETA anuncia su disolución, solamente como truco para mantener un gobierno más dialogante.
Además, si el PP gana sin mayoría absoluta quizás acepte exigencias nacionalistas, como la catalana de apropiarse de los impuestos comunes y de la seguridad social.
Así está la situación, por lo que lo de Rajoy vencedor, ya, ya...
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SALAS. He aquí una pintura que el cronista no sabe por qué le recuerda el Guernica
Sigamos con pinturas. El Grito.