Los Mercados, la globalización y los emergentes, constituyen un océano en el que nadamos profundamente con el cambio de siglo, década anterior y posterior, y en ese mar, la tabla de salvación que relaciona ambos, la llaman competitividad, que reduciéndolo a una terminología económica aceptable es la relación con el mundo, o la capacidad de elaborar y distribuir más por menos. Sobre
la Competitividad ya escribí.Capacidad de fabricar mayor cantidad de producto en menor tiempo, posible con mejor valor añadido y facilidad de distribución a cualquier parte del mundo, en relación a nosotros mismos y a otros.
Salir de la crisis, significaría andar por ese camino, para que millones de españoles progresaran en sus condiciones de vida. Terminar la crisis, significa mejorar en parámetros como:
el empleo, y falta mucho, mucho, mucho; reducir la deuda y está aumentando; sanear el sistema financiero y aumentar el crédito extinguido, y podría estar empeorando y con posible nuevo rescate; significaría mantener sanidad y educación, y se están desmontado las joyas de la corona; sujetar y desarrollar el entramado científico, que está desapareciendo; mantener y sujetar pensiones, y se calcula, por lo bajo una pérdida de 33.000 millones en 10 años; desarrollar mejores asistencias sociales para los que ya han caído… y mejorar la competitividad. De cada punto vamos haciendo un pequeño repaso -ayer la deuda- para ver si de verdad estamos remontando como dice la propaganda del PP y afines. En España, gran parte de las élites políticas y económicas solo consideran el factor salarial como el determinante de posibles mejoras y esta ha sido nuestra losa durante cientos de años, la carcunda económica que solo sabe vivir a costa de privilegios estatales, subvenciones, exenciones y regalos del poder político al que soborna de varias maneras, la iglesia como institución contraria la ciencia y la investigación que minarían su parcela de poder, la religión como creencia opresora alejada de la realidad del mundo, y como ideología opuesta al desarrollo de la cultura del pueblo y a toda nueva opción posible… los gobiernos dominados por la derechona siempre fueron el lastre del trabajo, del desarrollo sostenible, de la I+D+i y así seguimos hoy con la representación de la derechona personificada en el gobierno del PP, que mientras hunde la ciencia, elabora nuevas leyes, la Wert, para regalar suelo a las instituciones religiosas para sus negocios de colegios privados. España, no mejora en competitividad según el World Economic Forum, y por lo observado hasta ahora, no hay planes en la dirección adecuada, solo pretende hacerlo a costa de bajar salarios y aumentar horas, la peor de las salidas posibles, ya que lleva la economía española en dirección a África. Ni siquiera los asiáticos están parados en la idea de competitividad ligada a bajos salarios, lo cual no quiere decir que no lo practiquen, sino que están dando pasos gigantescos de avance en su capacidad inversora en alta tecnología y en universidades, I+D+i y conocimientos, mientras las élites españolas en la política en el empresariado y en la Iglesia van en la dirección de siglos pasados. ¡Que desastre!
Vean los resultados del recién publicado The Global Competitiveness Report 2013–2014, España se mantiene en el puesto 35 del ránking, no mejoramos.