Cine y literatura, ¿hay mejor combinación? Sí; pero no se puede decir porque este blog está al alcance de los niños. Hacer una comparativa entre el libro y la película es algo enriquecedor. La respuesta suele ser previsible: la letra impresa es mucho mejor. Pero no es del todo cierto. Cada medio tiene su tiempo, su lenguaje, sus formas y su público. Vamos a comparar el cuento que publicó Ray Bradbury en 1952, “The sound of thunder”, y que en España se ha incluido en Las doradas manzanas del Sol (2005), y la película de Peter Hyams, estrenada también en el año 2005. Empezamos con una breve sinopsis. Una empresa vende viajes en el tiempo a millonarios para cazar animales en el Cretácico. El riesgo es que algo cambie el rumbo de la evolución. Y eso es lo que ocurre.
En ambas la historia se sitúa en el 2055, momento en el que una empresa llamada “Safaris en el tiempo” –en la peli “Safari temporal”-, utiliza una máquina para viajar al Cretácico. Lo hacen por dinero, claro está, y los clientes
son millonarios. Los de la película son zafios y pretenciosos, porque la idea es que lo importante no es el dinero, sino la honradez en sentido amplio: intelectual, humana y política. Bradbury caracteriza al millonario, un tal Eckels, como un tipo vulgar, sin más. La empresa no tiene escrúpulos en ningún caso, se mueve por dinero; esto en la película está personificado en el siempre excelente actor británico Ben Kingsley –Gandhi (1982), La lista de Schindler (1993) o Inteligencia Artificial (2001), y que veremos en El juego de Ender (2013)-, que le da una vida al empresario que no tiene en el cuento de Bradbury.El guía tiene un papel distinto en cada uno. Peter Hyams hace de Travis un hom

El animal a cazar es distinto. En la peli siempre es el mismo, mientras que en el cuento no siempre es el mismo. Si bien Bradbury saca al “lagarto del trueno”, dice que la empresa estudia a cada animal a matar, y si puede ser cazado lo marcan con pintura roja. Luego viajan dos minutos antes de su muerte y…negocio. Si bien tiene más lógica lo segundo, es cierto que introduce más solidez a la idea del cambio temporal el que sea el mismo animal. En la peli, la máquina les envía al mismo segundo que siempre pero todo ha cambiado, lo que es el anuncio de lo que se avecina. 
