Razones para ver Misión: Imposible – Fallout

Tom Cruise es Ethan Hunt. Y Hunt es Cruise. El protagonista principal de la saga de Misión: Imposible, ha convertido a Tom Cruise en el actor icono de un personaje que a su vez es también todo un icono. Más de veinte años de una serie de películas que partieron de la adaptación a la gran pantalla de una serie de espías de los años sesenta. Quién le iba a decir a Tom Cruise que con más de cincuenta años iba a seguir interpretando un mismo papel en unas películas que él mismo se ha encargado de producir. Será por eso por lo que el actor ha conseguido que esta saga no decaiga como otras. Misión: Imposible – Fallout es el, hasta el momento, último episodio de esta increíble historia, y aunque no lo parezca, en esta serie no vale aquello de “segundas partes nunca fueron buenas”. Fallout supera con creces todas las anteriores, incluida, en mi opinión, la mítica primera parte. Aquí van unas cuantas razones para ver esta emocionante película.

• Ver a Tom Cruise / Ethan Hunt hacer de todo, en cualquier escenario que se te ocurra, y haciéndolo con una gran credibilidad, es la primera razón de peso para ver esta película.

• Cruise no utiliza dobles de acción. Eso es bueno hasta que en una escena saltando edificios te rompes el tobillo.

• El reparto de personajes que acompañan a Hunt es lo suficientemente bueno como para no pensar que están en la historia como mero acompañamiento. Hay de 6 a 7 personajes secundarios que hacen de esta historia un conjunto redondo. Cada uno con su papel consigue equilibrar la máquina del guión.

• Como en cada película de Misión: Imposible, un buen número de escenarios impresionantes: Berlín, París, Londres y las (supuestas) montañas de Cachemira, son los lugares donde Hunt y compañía se juegan el cuello.

• Una película de acción como esta necesita unas escenas acorde a sus personajes e historia. Fallout es la película perfecta en lo que respecta a esto. La persecución por París es de lo mejor que se ha hecho en mucho tiempo. La escena del salto en paracaídas, rodada en un solo plano secuencia desde la perspectiva de Hunt, es otra razón de peso para considerarla increíble.

• Pocas veces prestas atención a la banda sonora de una película de este estilo. Pero es que el trabajo de Lorne Balfe me parece tan soberbio, que creo que se merece alguna que otra nominación en los premios cinematográficos.

• Los habituales giros en la historia, marca Misión: Imposible, no podían faltar aquí. Son esos giros los que siempre han conseguido asombrar al espectador.

• En Fallout los efectos visuales acompañan a los actores, y no al revés.

• De los 147 minutos aproximados de Fallout, no encuentras ni un solo momento de respiro.

• Y probablemente el argumento de mayor peso para ver Misión: Imposible – Fallout: la mejor película de acción del año.

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