En la Universidad de Michigan,
desarrollaron un reactor de plasma no térmico que deja a los patógenos en el
aire incapaces de infectar a los organismos huéspedes, incluidas las personas.
El plasma oxida los virus, lo que desactiva su mecanismo para ingresar a las
células. La tuberculosis ,el sarampión y la gripe pueden seguir siendo
infecciosa en el aire durante más de una hora, algo que los investigadores
habían pensado anteriormente que era poco probable. Los espacios cerrados o
abarrotados reducen las oportunidades de degradación o dilución del virus en el
aire, aumentando las posibilidades de que una exposición conduzca a una
infección. Existen varias teorías sobre cómo los plasmas no térmicos matan a
las bacterias, pero los virus en el aire no están "vivos" como las
bacterias y, por lo tanto, no pueden "matarse" de la misma manera. En
las pruebas, el plasma redujo la cantidad de virus infecciosos en el aire en
más del 99%, pero los virus permanecieron con su ADN prácticamente sin cambios.
Esto significa que el plasma no destruyó el virus sino que alteró su capacidad
de infectar. Entender cómo sucede esto, ayudará a diseñar o "ajustar"
el reactor. Los investigadores están considerando usar reactores de plasma no
térmicos en aviones para combatir la propagación de enfermedades infecciosas
como es el caso de los Coronovirus.