El Real Madrid y el F. C. Barcelona protagonizaron ayer una de las finales de copa más emocionantes de los últimos años. Hubo de todo, intensidad, alternancia en el marcador, tensión, juego físico y clase, mucha clase, comandada por Mirotic y Rudy por parte de los blancos y por Tomic y el siempre determinante Juan Carlos Navarro en el cuadro azulgrana. El desenlace fue digno de un espectáculo de tal calibre: tras la remontada del Barça de 7 puntos con triple de Oleson, canasta de Huertas y el dos más uno nuevamente de Oleson, que ponía a los azulgrana 76-75, el Madrid se encomendó a la inspiración de Sergio Llull, que con un lanzamiento sobre la bocina puso el definitivo 77-76 y dio el título al conjunto de Pablo Laso, con lo que se rompe el empate a 23 copas que tenían ambos y convierte al conjunto blanco en el rey de copas del baloncesto español.
El Madrid, que llevaba la vitola de favorito en esta copa, se había deshecho con mucha superioridad del Gran Canaria en cuartos y del Cai en Semifinales, e iba con pisada firme a por su primer título de la temporada. Por su parte, el Barcelona dejó en la cuneta al Iberostar Tenerife y al Valencia Basket, con menos superioridad que los blancos pero sin excesivos problemas. Ambos equipos llegaron a la final sin sorpresas, era lo que todos esperábamos.
Así pues, sobre el papel, el Real Madrid era favorito al título pero el Barcelona no se lo puso fácil y planteó dura batalla durante todo el encuentro. Todos los cuartos acabaron igualados, las ventajas no superaban los 4 puntos de unos y otros, Mirotic ponía su arsenal ofensivo junto con Rudy, que era contrarrestado rápidamente por Navarro y Tomic y así se llegó al último cuarto. Tras una buena jugada de Mirotic, el Madrid se iba de 7 y parecía que iba a ser el arreón definitivo, pero una gran reacción del Barcelona con puntos de Oleson y una canasta de Huertas –una pesadilla para Draper durante todo el partido- pusieron al Barcelona con 1 punto de ventaja, en disposición de llevarse la final. Sin embargo, Sergio Llull no estaba dispuesto a dejar que los blaugranas se llevaran el título y su suspensión, pisando la línea de tres, dio la victoria a los blancos y un nuevo título.
Con el resultado de esta final y de los últimos choques entre ambos equipos parece que existe la tendencia de que el Barcelona está perdiendo la hegemonía del baloncesto español y está tomando el relevo un Real Madrid que funciona como una apisonadora desde la temporada pasada. Veremos si se confirma con un nuevo título de liga para los blancos o, por el contrario el Barcelona es capaz de reaccionar y dar la vuelta a la situación. Por el momento, el Real Madrid es esta temporada favorito a conseguir un triplete histórico: Copa, Euroliga y Liga. Estaremos atentos.