La última jornada de la Liga BBVA 2012-2013 trajo consigo la confirmación de algo que se veía rumiando durante las últimas 3 temporadas, las que llevaba, de forma consecutiva, el equipo maño en 1ª división, el descenso del Real Zaragoza a la categoría de plata. No se puede decir que haya sólo un motivo para explicar lo que ha pasado, en estas ocasiones se suele apelar al colectivo arbitral, a la mala suerte o a complots y teorías de la conspiración. Lo cierto es que, deportivamente, han fallado muchos aspectos que, a continuación, pasamos a detallar, línea por línea:
Portería: Roberto ha ocupado el puesto durante la mayoría de partidos, ha sido de los mejores del equipo pero, con todo, no estado al nivel de la temporada anterior. Sigue siendo un portero excelente en el 1vs1 pero su inseguridad en las salidas ha contagiado al resto de la zaga propiciando numerosos goles a balón parado. Es uno de los jugadores que más salida de mercado tiene, pero recordemos que no pertenece a la entidad blanquilla, seguramente haya sido su último partido en la portería zaragocista.
Defensa: Al comienzo de temporada las noticias eran buenas, Sapunaru y Abraham en los laterales daban buenas sensaciones y Álvaro había sido un gran fichaje, joven, con calidad y con proyección. Si se encontraba otro central titular se podían estar sentando las bases de un gran equipo. Pero este central no se encontró, pese a probar a Paredes, Loovens y Pinter y el resto de la zaga se acabó contagiando bajando su rendimiento. El caso de Lanzaro será analizado en el apartado referente al entrenador.
Centro del Campo: Se ha variado entre 2 ó 3 pivotes. El organizador de juego, cuando ha podido, ha sido siempre Apoño, que ha jugado gran parte de la temporada con molestias, infiltrado, no se le ha cuidado porque la mala confección de plantilla hacía que no hubiera otro jugador que pudiera cumplir su rol. Romaric, el que estaba señalado para eso, se ha pasado, con consentimiento del club y del cuerpo técnico, toda la temporada pasado de forma, con lo que no ha contado prácticamente nada.
El puesto de mediocentro más posicional y defensivo se lo han repertido Movilla, José Mari y Pinter.
Mediapuntas: Otra línea que ha experimentado bastante rotación, tanto táctica, variando entre jugar con 2 extremos sólos o con mediapunta, como de nombres. Montañés ha sido el único fijo y el de rendimiento más regular. Víctor Rodríguez comenzó muy bien, pero tras unos problemas físicos no se volvió a encontrar cómodo. El resto de integrantes de la línea vinieron en el mercado de invierno. Rodri, con la confianza del entrenador ha sido el más habitual.
Curioso el caso de Rochina, que ha dispuesto de pocos minutos, casi todos partiendo desde el banquillo, pero ha sido de los más destacados cuando ha podido jugar. La explicación de su ausencia en el 11 ha sido que a Jiménez le gusta tener un plan B en el banquillo para cambiar el curso del partido.
Delanteros: O delantero, porque el titular durante toda la temporada ha sido Helder Postiga, que ha conseguido una buena cantidad de goles. Al principio su suplente fue Aranda, que se marchó tras protagonizar una espantada y en el mercado invernal vino Bienvenou, que prácticamente no ha jugado. El jugar toda la temporada con un sólo delantero ha condicionado a esta línea.
Entrenador: Manolo Jiménez comenzó a perder el control del vestuario con el caso Lanzaro, un tema de faldas que afectó, más de lo que debería, dividiendo a la plantilla en 2 bandos enfrentados que han acentuado aún más la cortedad de la misma.